El presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, está indignado con el protagonismo que ha adquirido Gonzalo Boye durante la tramitación de la Ley de amnistía del 1-O.
Tal y como desveló este diario el pasado mes de noviembre, Conde-Pumpido colaboró en secreto con el Gobierno socialista para elaborar la amnistía. El presidente del TC participó en los trabajos preparatorios previos para diseñar y redactar la Ley que sirvió para que ERC y Junts brindasen su apoyo al PSOE e investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Boye, que es el abogado del expresidente catalán fugado Carles Puigdemont, también ha participado en la elaboración de la amnistía.
Fuentes del TC consultadas por Libertad Digital afirman que «Conde-Pumpido está muy enfadado con el protagonismo que ha tenido Boye en los últimos meses con la elaboración de la Ley. El presidente del Constitucional quiere neutralizar la frivolidad de Boye al que considera un jurista de segunda categoría en comparación con él mismo».
«Quiere ser el único director de orquesta y autor de la Ley de amnistía. Está muy indignado por las diferentes enmiendas que se han presentado por parte de ERC y Junts al primer texto que él visó para luego poder avalarlo en el seno del Tribunal de Garantías cuando se estudie un eventual recurso de inconstitucionalidad presentado por el PP», añaden.
Las mismas fuentes consultadas por LD apuntan que «Conde-Pumpido se ha lamentado ante sus propios compañeros del TC al considerar que ha perdido el control sobre el texto inicial. De hecho, su esposa y vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Clara Martínez de Careaga, votó a favor del informe del bloque izquierdista del CGPJ elaborado por la vocal Mar Cabrejas que daba el visto bueno del primer texto sobre la amnistía presentado por el Gobierno».
Mientras tanto, la figura de Gonzalo Boye sigue ligada a la polémica. El pasado mes de julio, la Audiencia Nacional desestimaba las solicitudes de José Ramón Prado Bugallo, ‘Sito Miñanco’, y del propio Boye para que no se les juzgara por blanqueo de capitales en la denominada ‘Operación Mito’. En dicha operación se investiga la presunta introducción en España de casi cuatro toneladas de cocaína y el entramado creado para ocultar los beneficios por distintas vías.
En un auto, la Sala Penal de la Audiencia Nacional desestimaba los artículos de previo pronunciamiento presentados por Miñanco y por Boye en los que pedían que se estimara la excepción de cosa juzgada, es decir, que no se sentaran en el banquillo puesto que ya habían sido juzgados anteriormente por hechos similares a los de la «Operación Mito».
El Gobierno y Conde-Pumpido, a por el referéndum pactado
Tal y como publicó LD, el Gobierno de Pedro Sánchez y el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, exploran por otro lado la «constitucionalidad» de un referéndum de independencia pactado en Cataluña. La semana pasada, el presidente catalán Pere Aragonès propuso un referéndum sólo para Cataluña con la pregunta: «¿Quiere que sea un Estado independiente?». Según Aragonès, la «vía óptima» para resolver el conflicto político entre España y Cataluña es celebrar un referéndum de independencia que ampararía el artículo 92 de la Constitución y les permitiría realizarlo «sin ninguna modificación legislativa».
«Conde-Pumpido ha abierto una nueva vía de comunicación con el Ejecutivo socialista con el objetivo de sacar adelante un referéndum de independencia en Cataluña pactado por el PSOE y sus socios de legislatura Junts y ERC para avalar su supuesta constitucionalidad. Ya se ha pasado la fase de la Ley de amnistía por el golpe del 1-O, y ahora ya está encima de la mesa el referéndum. La interposición de recursos contra el citado referéndum terminaría inevitablemente ante el Constitucional», apuntan fuentes del TC.
