MADRID, España.- La familia de Faraj Jarjour, el turista canadiense que falleció en Varadero, Cuba, en marzo pasado, finalmente ha recibido una respuesta sobre el paradero de su ser querido.
Este jueves, la familia Jarjour reveló que las autoridades cubanas cometieron un grave error al enviar el cuerpo de Faraj Jarjour a Rusia, donde fue sepultado en una ciudad al norte de Moscú. Faraj Jarjour, un ciudadano canadiense de 68 años de origen sirio y residente en Montreal, sufrió un ataque al corazón el pasado 22 de marzo mientras disfrutaba de unas vacaciones en Varadero con su familia.
La confusión comenzó cuando la funeraria canadiense que recibió los restos desde Cuba notificó a los hijos de Jarjour, Miriam y Karam, que el cuerpo no correspondía al de su padre. Tras una serie de comunicaciones entre las autoridades canadienses y cubanas, se descubrió que el cuerpo de Jarjour había sido erróneamente enviado a Rusia.
La ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Mélanie Joly, se involucró en el caso y conversó con su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, en un intento por resolver la situación.
Finalmente, se confirmó que el cuerpo de Faraj Jarjour fue sepultado en Rusia, sin el conocimiento de la familia del difunto en ese país. Ante esta situación, las autoridades canadienses han asegurado que el cuerpo será desenterrado y repatriado a Canadá.
A pesar del alivio de saber dónde se encuentra el cuerpo, la familia Jarjour enfrenta una nueva incertidumbre sobre cuándo podrán ser repatriados los restos desde Rusia, ya que ello requerirá la exhumación del cuerpo ya sepultado.
La familia del fallecido en Varadero había pagado 10.000 dólares por la repatriación desde Cuba del cuerpo de Faraj Jarjour, pero en su lugar recibieron el cuerpo de un ciudadano ruso 20 años más joven. Miriam Jarjour, hija de Faraj, describió el shock de descubrir que el cuerpo recibido no se parecía en nada a su padre.
Esta tragedia se sumó a las dificultades enfrentadas por la familia Jarjour desde la muerte de Faraj en Cuba. Debido a la ausencia de un médico en el hotel donde se hospedaban, la familia tuvo que esperar horas por los servicios de emergencia para trasladar el cuerpo. Luego, tuvieron que regresar a Canadá mientras el cuerpo permanecía en Cuba, a la espera de los documentos necesarios para repatriarlo.
Aunque la familia enfrenta nuevos obstáculos en el proceso de repatriación, Miriam Jarjour expresó su alivio por finalmente saber dónde se encuentra el cuerpo de su padre, aunque lamentablemente en un país distinto al deseado. “Al menos sabemos dónde está. No es fácil para nosotros”, declaró Miriam Jarjour al medio canadiense TVA Nouvelles
La familia espera que se resuelva esta situación lo antes posible para poder despedirse de Faraj y encontrar un cierre adecuado a esta dolorosa experiencia.
