El servicio de carga, una parte crucial de la iniciativa de la Franja y la Ruta, comenzó a funcionar en marzo de 2011.
Durante los últimos años los trenes han recorrido la ruta transportando prendas de vestir, autopartes, productos químicos y otros bienes chinos a los consumidores europeos, mientras que vuelven con alimentos, maquinaria, equipos y madera europeos.