La libra esterlina se debilitó fuertemente ayer cuando el Banco de Inglaterra reveló una mayor disposición a investigar y discutir las tasas de interés negativas como una opción política, pero desde entonces ha recuperado sus pérdidas frente al dólar estadounidense. El Banco de Inglaterra mantuvo las tasas sin cambios en una votación unánime en el Comité de Política Monetaria. El aspecto más interesante de la declaración y las minutas de la reunión generalmente sin incidentes fue la noticia de que el MPC había discutido las tasas de interés negativas como una herramienta de política, y que la opción sería explorada más a fondo por el BoE. Esto no significa que las tasas negativas se estén preparando con la intención de un uso inminente, sino simplemente que el Banco de Inglaterra, como banco central importante, está investigando a fondo la opción.
Quizás de forma contraria a la intuición, el hecho de que la economía del Reino Unido se esté recuperando más rápido de lo esperado no es incompatible con las tasas negativas del MPC. Como dejó en claro el Informe de política monetaria de agosto, el MPC cree que las tasas negativas se utilizan mejor en momentos en que los bancos están menos preocupados por los riesgos del balance, como durante una recuperación. La TPM de agosto también dejó en claro que el MPC creía que los dos mayores problemas con tasas negativas eran los posibles efectos negativos en el sentimiento, porque son inusuales, y la transmisión a través del sector bancario. Ambos riesgos deberían ser abordados y presumiblemente involucrarían algún esfuerzo de comunicación del tipo que Andrew Bailey ha dicho que sería necesario antes de implementar tarifas negativas.
Las tasas y los mercados de divisas tomaron los comentarios como una señal de que la probabilidad de un recorte en territorio negativo había aumentado, y la libra se vendió en consecuencia. Más tarde en la tarde, la libra esterlina recuperó algunas de sus pérdidas rápidamente después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyden, dijera que la informalidad de esta semana había sido «útil» y que seguía «convencida» de que era posible un acuerdo. Los datos de esta mañana han incluido las ventas minoristas del mes de agosto, que mostraron un sólido aumento mensual del 0,6%.
Después de un breve intento de recuperación, el dólar comenzó a debilitarse ampliamente ayer, mientras que la renta variable estadounidense también estuvo bajo presión. Con base en los tipos de cambio actuales, el índice Bloomberg Dollar Spot parece estar en camino de publicar su declive semanal en tres semanas. La Reserva Federal dijo ayer en un comunicado que pronto decidirá si se extenderán las restricciones sobre dividendos y recompras para los bancos estadounidenses. Las restricciones son un reflejo de la cantidad de apoyo que los balances bancarios han recibido de las medidas de la Fed y la probable reacción del público en caso de una ola de dividendos y recompras destinadas a recompensar a los accionistas. La Fed pondrá a prueba a los bancos durante las próximas semanas utilizando escenarios publicados ayer. Los datos de ayer incluyeron otra semana de elevadas solicitudes semanales de desempleo, que registraron 860.000. Hoy se publicarán los datos de la cuenta corriente.
Fue otro día de negociación en un rango estrecho para el dólar canadiense, ya que continúa subiendo muy lentamente. Ayer, la noticia principal se centró en que la vicegobernadora del Banco de Canadá, Carolyn Wilkins, no buscará un segundo mandato cuando expire el 1 de mayo de 2021. Si bien este no fue un evento importante que movió el mercado, destaca un cambio adicional en la central banco como otro miembro integral opta por dejar su cargo. Wilkins fue pasado por alto como el próximo gobernador del BoC a favor de Tiff Macklem a principios de año, lo que fue una sorpresa. Hoy, el dólar canadiense podría encontrar la fuente de estímulo para romper sus estrechos rangos de negociación a partir de la publicación de los datos de ventas minoristas de julio. Las expectativas se sitúan en un crecimiento intermensual del 1,0% después de que las ventas minoristas repuntasen un 23,7% en el mes de junio cuando la economía se reabrió.
