Ciudad Real volverá a tener mañana aeropuerto, nueve años después de su primera intentona fallida de comunicarse con el mundo por avión. En junio de 2010, sumido en la bancarrota por la falta de negocio y el mazazo de la crisis económica, el aeródromo tuvo que echar el cierre. Apenas estuvo un año y medio en servicio. Lo suficiente, sin embargo, para que su fiasco se llevase por delante buena parte de Caja Castilla-La Mancha, el principal financiador de los más de 1.000 millones de euros que costó edificar la instalación. Mañana, con nuevos dueños, Ciudad Real International Airport (CRIA), volverá a la actividad.
Lo hará poco a poco, con el vuelo de un avión ejecutivo. Como si la modestia del aparato simbolizase el nuevo espíritu con el que sus dueños afrontan el proyecto. Antaño aspirante incluso a ser el segundo aeropuerto de Madrid, ahora sus gestores ambicionan convertirlo en un mix entre el de Zaragoza, modelo a seguir en carga; y el de Teruel, referencia en aparcamiento de aeronaves y mantenimiento de bajo nivel. “Nosotros ahora queremos ir poco a poco”, explican desde CRIA, que lleva ya invertidos más de 100 millones en la instalación.
Aunque el aeropuerto ya estará completamente operativo a partir de mañana, su actividad tardará cierto tiempo en coger vuelo. CRIA asegura que tiene preacuerdos con bastantes compañías aéreas internacionales que ahora debe materializar. “Una vez que se inicien las operaciones, podremos empezar a cerrar acuerdos”, explican. Consideran que es lógico que hasta que no vean que el aeropuerto funciona con normalidad, las empresas no se quieran comprometer.
A pesar de que la empresa no da cifras, asegura que son “bastantes” las empresas que quieren instalarse en Ciudad Real. Hasta que lleguen, el horario de funcionamiento del aeropuerto será limitado, de diez de la mañana a seis de la tarde. Aunque también abrirá bajo demanda. Para monitorizar los vuelos, usará el sistema automatizado AFIS.
La viabilidad de Ciudad Real como terminal de carga tiene para los expertos mejores expectativas que como aeropuerto para pasajeros. Entre otras cosas, por un factor con el que no pudieron contar sus primeros gestores: el comercio electrónico. El despegue experimentado en los últimos años por la venta online ha impulsado la logística con mucha fuerza. Y esta circunstancia puede ser explotada por Ciudad Real. El aeropuerto está en una situación geográfica única, equidistante de Sevilla, Barcelona, Lisboa, Algeciras, Valencia y Bilbao; y tiene buenas comunicaciones.
Pero para asegurar el éxito de su negocio de carga, Ciudad Real debe mejorar sus conexiones con la autovía a Extremadura así como a la red de ferrocarril convencional. Entre los planes de CRIA está construir un apeadero para este fin si la demanda lo justifica.
