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Los tipos ultra bajos del BCE aguantarán ahí mucho tiempo

En estos momento se están dando las condiciones que los tipos de interés a nivel europeo se mantengan bajos durante unos años más. Seguramente que sólo se podrán aumentar los tipos de interés cuando se produzca un aumento de los sueldos, de la productividad y de la población, mientras tanto los intereses pueden continuar así durante años.

Los tipos de interés oficiales del BCE están fluctuando alrededor del 0. Lo mismo pasa con los tipos de interés efectivos sobre las obligaciones a más largo plazo. Al mismo tiempo, los indicadores de confianza permiten vislumbrar una nueva desaceleración de la actividad económica mundial. Entretanto, los bancos centrales nacionales en Europa, aunque han ampliado considerablemente sus balances, esperan a un aumento de la inflación.

Actualmente existe un riesgo de burbuja y son los bonos, como podemos ver en los bonos de Alemania que están al 0,55 por ciento y deberían estar, al menos, rondando al 3 por ciento. Las burbujas siguen siendo el talón de Aquiles de Europa, ya que la detección de estas burbujas son muy subjetivas y generalmente hay bastantes indicios de cuando van a explotar.

Nos podemos preguntar: ¿Ha habido un cambio de percepción en Europa? ¿Existen límites a esta política monetaria? ¿Cuánto va a durar la actual situación de los tipos de interés?

El cambio de percepción de lo caro o lo barato

Ha cambiado la manera de medir lo caro o lo barato en un activo financiero, ya que el PER (número de veces que el beneficio está dentro del precio de la acción), no es relevante para ver si la Bolsa está a niveles inflados o no.

Hace unos años el PER por el BPA (beneficio por acción) era un buen medidor para saber el precio de la acción. Esto servía cuando los tipos de intereses estaban a niveles superiores a los actuales, por con los tipos de interés tan bajos, este tipo de operaciones ha perdido su valor. Por tanto, se puede decir que este es el cambio que vive hoy en día el sector financiero.

Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, está comprando bonos pese los tipos de interés tan bajo, ya que conoce que no es una buena operación pero el BCE lo hace para mantener el sistema social actual.

Para invertir en una burbuja la clave es ver si compras pronto y eres capaz de aguantar para vender el activo en el mejor momento posible, o por el contrario, si vendes demasiado pronto, o demasiado tarde, no serás capaz de desprenderte y te quedarás con el activo con un valor muy inferior al que se compro.

Un buen ejemplo de este tipo de burbujas es la actual China, la mayor que tiene en todos sus tiempos, nadie la pincha porque es realizado por el propio Estado y si la pinchan seguramente explotaría su sistema social. Esa es la única razón porque dure la burbuja durante tanto años.

¿Existen límites a esta política monetaria?

Ni el BCE ni Mario Draghi son superhéroes, pero al menos un poco de credibilidad por haber contenido las fuerzas deflacionistas en Europa surgidas tras la crisis de 2008 lo parecen. Además, Draghi siempre ha reconocido que su margen de actuación es limitado.

La única medicina que están aplicando los gobiernos europeos son las denominadas ‘reformas estructurales‘. Incluso llegan a considerar que la reducción del gasto público y la subida de los tipos de interés serían las respuestas adecuadas para la actual difícil situación económica. Pero existe una minoría insiste en una marginación total del sector público, para que la destrucción creativa tenga efecto.

Esta claro que la economía Europea sufre ante todo un problema de demanda, no de oferta. Aunque los tipos de interés estén a niveles mínimos, se ahorra más de lo que se invierte y las perspectivas económicas, poco esperanzadores, no dejar ver cambios, al menos en un futuro cercano.

Los bajos precios de la energía y las materias primas a nivel mundial van a sostener la economía durante cierto tiempo. Además, existen varios efectos básicos asociados a los precios de las materia primeras que indican que la inflación tiene bastantes probabilidades de aumentar en muchos países de Europa. Pero este aumento no significa que todo vaya bien. Es poco probable que las perspectivas estructurales mejoren de repente.

Por otra parte, no se ve ninguna presión inflacionista en Europa, ya que las previsiones se mantienen a niveles bajos, y que los objetivos del BCE en materia de inflación, fijados en el 2 por ciento, no se van a conseguir.

¿Cuánto va a durar la actual situación de los tipos de interés?

A medio y largo plazo, existen grandes posibilidades de que haya un período de crecimiento relativamente lento, asociado a los tipos de interés fluctuantes alrededor del 0, en un contexto de adversas perspectivas demográficas y una disminución del margen de maniobra frente la acumulación de la deuda.

Los tipos de interés efectivo se han reducido durante las últimas décadas, a pesar de una gran acumulación de la deuda privada y pública, una situación demográfica favorable y una afluencia de capitales hacia los mercados emergentes. Es decir, las últimas décadas los tipos de interés naturales han disminuido ligeramente por todo el mundo.

Todavía es pronto para saber si se va a dar un escenario de estancamiento secular, y el tiempo se verá si se va a producir. Pero si que se está viendo actualmente que la economía se ve atrapada en la falta de liquidez.

El BCE no ha agotado su munición para combatir esta situación. ¿Por qué intranquiliza tanto el nivel de endeudamiento, en una época en que los tipos de interés negativos representan un incentivo para que los gobiernos recurran al crédito e inviertan en infraestructuras?

La acción política de los países europeos pueden influir, de hecho, la necesidad de aumentar el gasto en infraestructuras aumenta de forma lenta pero segura. Aunque muchos países se han concentrado, de forma errónea o no, en el equilibrio de los presupuestos generales tras el inicio de la crisis del 2008. Hoy parece que un aumento de las inversiones podría contribuir a respaldar el crecimiento.

¿Las autoridades presupuestarias elijan esta vía? La respuesta es no. La oposición de Alemania a un crecimiento financiado por la deuda pone en la palestra que los obstáculos siguen siendo considerables.

Idealmente, las autoridades políticas deberían actuar con mayor eficacia para combatir la debilidad crónica de la demanda. Es evidente que el BCE y autoridades presupuestarias nunca pueden quedarse sin munición. Si colaboraran de manera intensiva, conseguirían un aumento de la demanda y de la inflación.

Las reformas estructurales se deben aplicar por este camino y no de forma aislada. Si se adoptan este tipo de medidas, es más probable que aumenten por fin los tipos de interés. En caso contrario, los bajos tipos de interés seguirán siendo un indicador del entorno económico deprimido.

En El Blog Salmón | ¿Qué efectos va a tener los tipos de interés estén al 0%?

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