Inicio Actualidad Económica NEG-Consejos prácticos para hacer un doctorado en Economía (I)

NEG-Consejos prácticos para hacer un doctorado en Economía (I)

De Pedro Rey Biel  (@pedroreybiel)

Una de las actividades más agradables asociadas con ser profesor universitario se produce cuando recibes un correo electrónico de un alumno (o alguna cabeza asoma por tu despacho) pidiendote consejo y ayuda para continuar sus estudios de postgrado. Normalmente son buenos estudiantes que llegan con información muy parcial y vaga sobre cuáles son los pasos para ampliar estudios o tener una carrera académica. En la mayoría de los casos, les remito a esta entrada de Luis Garicano del año 2012 pero, en muchas ocasiones, termino dándoles también mi propia visión, basada en mi experiencia de hacer un doctorado en el Reino Unido. Así que, dado que en la reunión de editores y colaboradores de Nada es Gratis que realizamos durante el Simposio de Análisis Econónico vimos que el post de Luis sigue siendo uno de los históricamente más leídos,  he creído que sería interesante desempolvar mi vieja sección de NeG-Consejos (aquí y aquí), actualizando y completando aquella entrada, por si puede ser útil para docentes y alumnos.

Como la entrada me ha quedado un poco larga, la publicaré en dos partes a lo largo de esta misma semana y la iré actualizando. Por supuesto, si quedan temas o aclaraciones pendientes, estaré encantado de hacer entradas posteriores. Por último, insisto en que muchos de los consejos aquí dados son especialmente subjetivos y basados en mi propia experiencia, así que, especialmene si son ya académicos, no los tomen como biblia y no se me enfaden (mucho) si discrepan. ¡Allá vamos!

  1. ¿Debo realizar estudios de postgrado?: Sí, siempre que tengas interés en realizar una carrera académica, aunque no termines de tener muy claro qué es eso, o creas que la formación obtenida durante el grado es insuficiente para optar a un buen trabajo o incompleta respecto a lo que podrías llegar a aprender. Tranquilo: no se nace sabiendo, y la mayoría de nosotros no supimos ni si nos gustaba investigar, ni en qué consistía exactamente, hasta el segundo o tercer año de nuestro postgrado. Lo que está claro es que estás sacando buenas notas y buscas formas de diferenciarte de los miles de compañeros que en unos años acabrán con el mismo título de graduado en Económicas (o Empresariales, Ingenierías o Matemáticas) que tú. Necesitas un buen expediente, porque será una señal, tanto para los demás como para tí, de que vales para ésto y porque ayuda a obtener becas y admisiones, pero no te vuelvas loco con las notas. Si lo habitual es que saques notables y sobresalientes (con algún aprobado rascado o alguna matrícula de honor), estás en posición de hacer un doctorado en alguna de las mejores universidades del mundo. ¡Créetelo! Date cuenta que el doctorado consiste fundamentalmente en investigar y que, por tanto, la capacidad para hacer bien exámenes, aún siendo una buena señal de tus habilidades (y probablemente mucho más de tu interés) no va a ser ya crucial. Tener las cosas claras (¡para eso estás leyendo!), tener iniciativa (¡por eso estás leyendo!) y tener capacidad de aguante (¡por eso sigues leyendo!) es mucho más importante. Una cosa más: si no consigues admisión directa en el doctorado mientras finalizas tus estudios de grado, puede ser muy buena idea hacer un primer año de master (o dos) en algún buen departamento, en muchos casos en España, que tenga buena reputación internacional y te ayude a hacer el salto posterior. En algunos casos, es incluso posible que al irte después al extranjero, te convaliden algunos de los cursos y puedas empezar antes a investigar. Pero no tengas prisa, aquí lo importante es formarte bien y conocer el área en que quieres hacerlo y quién quieres que supervise tu tesis, por lo que hacer cursos (incluso repetirlos) en un nuevo departamento, de forma que conozcas mejor a los profesores, rara vez es una pérdida de tiempo.
  2. ¿Dónde realizar el doctorado? Respuesta fácil. En la mejor universidad posible que te admita. Quítate de complejos. Con un buen expediente académico, cumpliendo plazos de presentación de papeles y apoyado por buenas cartas de recomendación, es perfectamente posible que te admitan en las mejores universidades del mundo. Date cuenta de que casos como el de Mar Reguant, no son tan extraños, y ni siquiera hace falta tener su expediente académico para seguir su trayectoria. Siempre que puedas permitírtelo (algunas universidades piden el pago de tasas sólo por hacer la solicitud), debes pedir admisión en algunas (pongamos 5, mejor si son 10 ó 15) de las universidades top americanas, en las mejores universidades europeas, y en al menos los mejores programas de doctorado en España (UPF, Carlos III, Autónoma de Barcelona, Cemfi ….). Por supuesto hay algunos otros sitios en España que también merecen la pena (no hago lista para que no se me enfade nadie) pero, en general, estás buscando 1) un programa internacional (no una universidad, sino un programa dentro de esa universidad asociado a un departamento) con docencia en inglés, 2) una universidad distinta de la tuya que te sirva para que te dé un poco el aire y 3) un departamento que no contrate (al menos inmediatamente) como profesores a sus propios estudiantes de doctorado (la endogamia es terrible para todos, incluido para tí, en el medio plazo, aunque parezca una solución facilonga en el corto plazo).  No todos los doctorados son iguales pero, superados unos mínimos marcados por los 3 requisitos que he listado, en todos vas a aprender más o menos lo mismo durante los cursos. Por tanto, lo que importa para seleccionar entre buenos doctorados es más el valor de señalización de cara al mercado laboral (el título de Harvard vende más que el de cualquier universidad española, aunque el nivel de los cursos no es muy distinto), y el que haya buenos especialistas en el área en el que quieras trabajar. Para saberlo, mira en las web de los profesores de cada departamento en qué temas trabajan y en qué revistas publican, buscando que exista una masa crítica de investigadores en aquello que más te interesa. Pero, como es muy probable que en tercero de carrera aún no sepas muy bien en qué área ivestigar, guíate sobretodo por que sea departamento «con nombre» y, a ser posible en algún lugar donde te apetezca y puedas vivir los próximos cinco años.
  3. ¿A quién pedir consejo y cartas de recomendación?: Olvídate del profesor de nosequé asignatura que te ha dado la mejor nota. Lo que buscas es a un profesor motivado con experiencia internacional. Es decir, alguien que preferiblemente tenga un doctorado de una buena universidad extranjera y que publique regularmente (y en los últimos años) en inglés y en las mejores revistas de investigación económica internacional.  Difícilmente alguien que no haya seguido la trayectoria que buscas tener va a poder aconsejarte, o su recomendación va a tener poco peso. Olvídate de acercarte sólo al profesor que te ha dado la mejor nota en una asignatura, si no cumple estos requisitos. A nadie le importa tu nota de Estructura de la Economía Regional III, lo que importa es que quien te aconseje y te firme la carta tenga reputación internacional y que te conozca lo suficiente como para que su carta sea más personal que simplemente listar tu expediente académico (eso ya lo mandas en un papel separado). ¿Que los profesores con mejor reputación de tu universidad apenas te conocen o te dieron una nota regulera? Pues ya estás tardando en pedirles una cita para contarles tus intereses e inquietudes y pedirles consejo. En mi experiencia, la mayoría de los alumnos son demasiado tímidos y creen que molestan por pedirnos este tipo de consejos… cuando la realidad es que es una de las partes más gratificantes de nuestro trabajo, especialmente porque es donde vemos que podemos tener más impacto. No seas tímido. Te aseguro que con el ego que tenemos (la mayoría de los académicos no éramos los más populares del instituto,…y ahora lo estamos compensando), nos encanta contar nuestra experiencia y echar una mano. Quizá no sea necesario que pidas la carta inmediatamente. deja que te conozcan, no seas un número más en la universidad, y el momento de pedir la carta llegará naturalmente. En muchos casos, somos los propios profesores los que tenemos que esforzarnos en identificar buenos alumnos a los que les puede interesar seguir esta trayectoria. Si tienes un mínimo interés…¡háznoslo saber!

En la segunda parte de esta entrada (que publicaré en unos días), hablaré sobre los trámites que hay que seguir y sobre las formas de financiar estos estudios. Puedo hablar de otras cosas si me las sugieren en los comentarios.

Pedro Rey Biel

Pedro Rey Biel

Doctor en Economía por University College London (2005). Actualmente es Investigador Ramón y Cajal del Departamento de Economía e Historia Económica de la Universitat Autònoma de Barcelona. Profesor afiliado de la Barcelona GSE y Research Fellow de MOVE. Sus campos de Investigación son: economía del comportamiento y economía experimental, diseño de instituciones, incentivos, Economía de la Salud.