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Saber más sobre economía, una asignatura pendiente

¿Por qué es interesante saber de economía?

En un primer momento, querer aprender sobre economía puede ser una tarea tediosa. O la información que se encuentra es compleja de aprender y entender, o faltan una serie de conceptos básicos sin los cuales no se puede seguir aprendiendo. Las razones por las que saber de economía, además de los términos básicos, se pone de manifiesto en los siguientes casos:

  • Una persona con conocimientos de economía puede acudir a una entidad bancaria o financiera y entender de lo que le están hablando. Basta con recordar como las famosas «preferentes» que se vendieron sin ningún tipo de pudor a personas mayores, hizo que buena parte de ellos invirtieran ahí sus ahorros, sin conocer lo que hacían y lo que es peor, sin plantearse si aquella compra podía ser o no una buena oportunidad. El resultado es de todos conocido, pérdida de los ahorros y problemas judiciales en la mayoría de los casos. Y todo con el agravante de darse en personas que se encontraban en el ocaso de una vida y que tenían en esos valores como una apuesta firme de rentabilidad.
  • La bolsa. Últimamente se ha puesto muy al alcance de la mano la opción de invertir en valores y en FOREX, con la promesa de unos rendimientos bestiales. Efectivamente esto puede ser así, pero gran parte de las personas que se ha aventurado a invertir en este tipo de negocios lo ha hecho sin la experiencia necesaria, con unos resultados muy negativos. En el peor de los casos, con deudas abultadas por pagar. La bolsa y el trading no es ni cuestión de suerte ni de presentimientos, parten de la premisa de un profunco conocimiento económico del que, por regla general se carece.
  • Productos como las tarjetas de crédito. Bien utilizadas son un recurso muy acertado y permiten tener liquidez en algunos momentos de apuro. Pero usadas sin control, conforman unas deudas posteriores diíciles de ir cancelando., ya que algunas tienen unos intereses abusivos y que son calificados como usura, al ser de un 26 por ciento o más. Si una persona tiene formación sólida en economía, puede saber cuál es el tipo de interés que se le va a aplicar y discernir si es algo o no que le conviene. Los juzgados tramitan actualmente muchas demandas referidas a empresas financieras que aplican estos intereses tan abusivos.
  • El boom de la burbuja inmobiliaria. Un hecho que afectó de forma masiva a los españoles, que, animados por la bonanaza económica no fueron capaces de diversificar sus inversiones, apostando todo a lo que parecía un valor seguro: el ladrillo. La llegada de la crisis de 2008, con una oferta muchísimo mayor de la que éramos capaces de absorber, hizo que gran parte de estos inversores vieran en peligro su economía. Hipotecas que había que pagar y una falta total de interés por el mercado inmobiliario, hizo que en el peor de los casos se arruinaran. ¿Hubiera sido menos la devacle si estos inversores hubieran tenido más cpnocimietos económicos sólidos? No cabe duda que sí.

Esta cuatro razones, por poner solo algunos ejemplos, son una muestra de por qué es interesante una educación financiera desde la escuela primaria, y que se debería ir ampliando con el paso del tiempo. De igual forma, los convulsos momentos que a nivel macroeconómico nos están tocando vivir, y que luego tienen traslación en la economía de consumo, también son una muestra de la importancia que tiene una correcta educación económica. Formarse adecuadamente ya no tiene por qué ser aburrido y complejo, son muchos los recursos que se encuentran de manera libre en las redes para poder tomar el control de nuestras vidas en cuanto al dinero.

Sea como sea, la economía es quizás la base de nuestra vida diaria, ya que nos manejamos según a unos ingresos y a un nivel de gasto porterior. ¿Por qué no invertir nuestro tiempo y esfuerzo en algo que nos puede hacer más libres y competentes? No cabe duda que las personas que tienen una buena base de conocimientos referidas al dinero, son aquellas que posteiormente gozan de mayor libertad para actuar, y además son las que saven navegar siempre en aguas revueltas. Es el moemento de invertir nuestros esfuerzos en aquello que nos puede hacer más libres.