El presidente del PP, Pablo Casado, en su turno de réplica, ante las dudas que se han generado con la vacunación tras conocerse algunos casos de trombosis con las dosis de Astrazeneca y Janssen y por la confusa política del Ejecutivo con los tramos de edad para incularse las dosis, ha emplazado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a vacunarse juntos para «dar tranquilidad», sobre todo a los mayores, y transmitir que es seguro hacerlo: «Usted y yo podemos dar ejemplo».
Antes, Casado ha acusado al presidente del Gobierno se ser «el cuello de botella para la recuperación» y le ha reprochado que «no está haciendo nada ni para que la vacunación vaya bien ni para que los fondos vengan rápido».
Sobre vacunación, el líder de los populares le ha recordado a Sánchez lo que dijo el ministro de Ciencia, Pedro Duque: «Se acuerda usted cuando dijo que íbamos a tener una vacuna para el verano del 2020». Y ha añadido: «Además, si usted dice que las vacunas las administran las comunidades autónomas y dependen de Europa, ¿usted para qué sirve, para qué le pagamos el sueldo?«. Se ha respondido el propio responsable del PP: «Usted solo sirve para poner pegatinas y cuando viene bien gafarlas y decir que van a venir vacunas cuando luego no llegan».
Sobre el cuello de botella de los fondos europeos le ha dicho que «lo que quiere es seguir dando a dedo las ayudas a aerolíneas como Plus Ultra, una aerolínea chavista radicada en un paraíso fiscal». Le ha recomendado que «en lugar de ayudar a aerolíneas fantasma, debería ayudar a las empresas españolas estartégicas, como alguna energética o de automoción que por su auténtica cerrazón ideológica y dosgmatismo no están ayudando y dejando al albur de opas hostiles a diferencia de lo que Francia».
Del mismo modo, Casado le ha recordado a Sánchez que «según el FMI, España va a ser el país con más paro solo superado por Venezuela, Sudán Bosnia y Palestina… Enhorabuena señor Sánchez… es usted el campeón de la creación de empleo en plena pandemia«.
Para cerrar, le ha hablado de la campaña electoral en Madrid y en la que se hametido tan de lleno: «Siga usted yendo a mítines en Madrid, como siga apareciendo está asegurada la mayoría absoluta en Madrid».
¿Pero usted quién se cree que es?
En su primera intervención, el líder de la oposición ha estallado contra el presidente del Gobierno. “¿Pero usted quién se cree que es y dónde se cree que está?”, ha espetado el líder de los populares a Sánchez, que presentaba este miércoles su plan de recuperación en el Congreso de los Diputados.
“Llevamos doce comparecencias aguantando la chulería de un Gobierno insensible e incompetente, y hasta aquí hemos llegado”, ha manifestado Casado, que ha reprochado al presidente del Gobierno el hacer los anuncios una y otra vez, sin llegar a explicar nunca el contenido de los mismos.
«¿A usted no se le cae la cara de vergüenza, señor Sánchez?», ha abundado Casado, que ha acusado al jefe del Ejecutivo de no legislar porque «prefiere gobernar como Napoleón, en el real decreto» y ha considerado un «insulto» que acuda a la Cámara Baja a «presumir».
Sánchez «lo ha fiado todo» a la vacunación y el plan de recuperación, pese a que no ha hecho «nada». «Ha ido a Bruselas y ha reconocido que estuvo cuatro días chupando rueda, negociaron las mujeres del PP europeo», ha censurado.
Por eso, Casado ha manifestado que el discurso de hoy de Sánchez es como una “pizza recalentada”. También le ha comparado con el cuento popular ‘Pedro y el lobo’, “porque anuncia siempre lo mismo y luego no viene y afirma que «empieza a ser gafe” cuando habla de las vacunas.
«Habla usted de Astrazeneca y hay un problema con Astrazeneca, habla usted de la Sputnik y a continuación sale Angela Merkel a decir que sondea la compra de esa vacuna, habla de la Janssen y se bloquea la distribución”, ha relatado.
Todo ello porque no participa, ha dicho Casado, en las decisiones sobre la distribución de las vacunas, pero presume de ello: “Usted no hace más que poner pegatinas y vender aquí lo que no es suyo”.
Casado ha cargado contra Sánchez por «presumir de no haber dejado a nadie atrás» cuando «hay dos millones de familias que hacen las colas del hambre y 30.000 ancianos han muerto en las residencias que Iglesias no se dignó a visitar”.
