Inicio Actualidad Descarado electoralismo en el 1 de mayo del Gobierno y los candidatos...

Descarado electoralismo en el 1 de mayo del Gobierno y los candidatos de la izquierda

Este sábado 1 de mayo han sido convocadas manifestaciones en toda España por el Día Internacional del Trabajo. En plena campaña electoral de la Comunidad de Madrid, en la manifestación en la capital se están congregando los candidatos de izquierda Pablo Iglesias, Mónica García y Ángel Gabilondo.

Además, la convocatoria de la capital cuenta con la presencia por primera vez de una ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. En declaraciones a la prensa en la cabecera, la vicepresidenta tercera se ha mostrado «feliz» de estar en la manifestación y ha subrayado que el protagonismo es de los trabajadores y los sindicatos, que cuentan con el respaldo, además, de otros seis ministros del Gobierno: la vicepresidenta Carmen Calvo, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, la ministra de Industria, Reyes Maroto, la ministra de Igualdad, Irene Montero, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, y el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes.

Díaz ha defendido su presencia en la marcha porque «siempre» ha participado en los actos del Día del Trabajo, que este año coincide con la campaña electoral en Madrid, a la que han sumado los sindicatos en la rueda de prensa previa a la manifestación, en la que ha advertido sobre las «miserias morales de la extrema derecha».

Así se ha pronunciado el secretario general de CCOO, Unai Sordo, que ha pedido hacer frente al «modelo de precariedad» y rehacer el contrato social como «mejor vacuna» para que las «miserias morales de la extrema derecha no convenzan». «El país tiene una deuda con su clase trabajadora», ha destacado.

«La mejor vacuna contra la extrema derecha es rehacer el contrato social«, ha defendido Sordo tres días antes de la celebración de elecciones en la Comunidad de Madrid. Sordo ha destacado la importancia que tienen las políticas en las condiciones de vida de los ciudadanos y que, ante eso, los sindicatos hacen las valoraciones que consideran.