Tras el parón obligado por el confinamiento, la división cerámica del grupo británico Victoria que incluye a Keraben, Saloni e Íbero ha retomado con fuerza la actividad.
De hecho, la división cerámica del fabricante de alfombras incluso ha aumentado significativamente en los meses de abril a septiembre, que suponen la primera mitad de su ejercicio.
El negocio cerámico de Victoria generó unos ingresos de 132,5 millones de libras (147,9 millones de euros) en su primer semestre del ejercicio, un 8,6% más que en el mismo periodo del año anterior. Hay que tener en cuenta que parte del incremento corresponde a la incorporación de empresas adquiridas en el último año, cuyos ingresos no se incluían el ejercicio anterior, como Íbero o los activos de la italiana Ascot. Según el grupo si se comparan en los mismos términos sin el efecto de las incorporaciones, entre junio y septiembre el descenso sería solo del 2,6%.
Con todo, el grupo reconoce que sus márgenes han caído y también establece algunas diferencias entre Italia, donde posee Ceramiche Serra y los activos de Ascot, y España. Así, destaca que los efectos negativos del coronavirus en la primera parte del año en el caso español fueron más largos al prolongarse durante más tiempo el cierre y «con menos apoyo público» que en Italia, donde de hecho prevé aumentar capacidad productiva a principios de 2021, aunque después de haber recortado empleo.
También destaca la fuerte recuperación de la marcas españolas, con la excepción de Saloni que por su mayor peso en construcción estima que tendrá una evolución más lenta. Sus previsiones para la parte final del año en España son muy buenas ya que está trabajando a plena capacidad.
Relacionados
Twitter
Linkedin
