El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha mostrado este miércoles su «satisfacción» por los indultos al tiempo que ha pedido al separatismo «gestos» y «buena actitud» a partir de ahora para contribuir al restablecimiento de las relaciones.
La primera prueba de fuego será este mediodía, cuando está previsto que los presos del procés salgan de la cárcel, donde harán declaraciones arropados por una comitiva que los recibirá. stas hagan declaraciones a las puertas de la cárcel, donde una comitiva los recibirá.
Los términos en los que el Gobierno aborda alguna de las exigencias del separatismo han cambiado sólo un día después de los indultos. Así lo ha trasladado Campo en una entrevista en la cadena SER, en la que el titular de Justicia no ha descartado un referéndum pactado. «Tengo claro que lo que se haga tiene que hacerse dentro del ordenamiento jurídico y la legalidad», ha afirmado el ministro, que repreguntado si eso incluye un pacto para un referéndum ha afirmado: «Dentro de la legalidad solo cabe lo que cabe».
En RAC1, minutos antes, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, ha afirmado que el independentismo se queda sin «excusa» tras los indultos, por lo que pide al secesionismo que empiece a dar pasos por la convivencia.
La clave de ese reencuentro será la mesa de diálogo, para la que todavía no hay fecha. Antes, Pedro Sánchez recibirá «muy pronto» a Pere Aragonès en Moncloa, donde será fijado un calendario «para empezar a trabajar».
En alusión a Carles Puigdemont, y a las declaraciones de Ione Belarra sobre el expresident, Calvo ha desautorizado a la ministra de Derechos Sociales y ha matizado que «no es lo mismo quien se quedó a asumir las consecuencias de sus actos que quien huyó».
En opinión de la vicepresidenta primera, «no son situaciones comparables» las de los indultados y los huidos. Eso sí, confirma que habrá reforma del código penal para modificar el delito de sedición «porque hay tipos penales que tienen que ponerse al día».
En los mismos términos se ha pronunciado Campo: «El Real Decreto que hoy se publica es irreversible, pero dentro del indulto está la condicionalidad. Si se produjera una comisión de un delito grave, el propio tribunal sentenciador diría que tiene que cumplirse la pena que dejó de cumplirse». En caso de venir a España, el expresidente catalán «sería juzgado por los tribunales españoles porque es un huido de la justicia» y añade: «Los indultos a él no le afectan para nada»,
