Gabilondo no abandonará el barco, pese al naufragio del martes. Al menos eso deslizan fuentes próximas al socialista, quienes aseguran que recogerá su acta como diputado en la Asamblea regional. La confirmación de que Gabilondo no dimitirá y recogerá su acta de diputado choca con algunas voces de la dirección socialista que en esta jornada postelectoral daban por segura la salida del candidato socialista. A su juicio, no se trata de acusar directamente a Gabilondo, pero sí creen necesario un drástico giro tras la debacle del 4M.
La Ejecutiva Regional del PSOE-M, reunida la tarde de este miércoles para analizar los resultados electorales, que fuentes socialistas califican «sin paliativos» como malos, y tratar de averiguar además «qué ha fallado» para reorientar la dirección del partido en la Comunidad de Madri, ha decidido no plantear cambios drásticos y mantendrá el calendario previsto, con la celebración del congreso regional después del federal, fechado en octubre.
Hasta entonces, Ángel Gabilondo se mantendrá como portavoz en la Asamblea Madrileña y José Manuel Franco, secretario general socialista en Madrid y al que también se le apunta como culpable de la debacle, seguirá en el cargo.
El PSOE de Madrid ha informado en una nota de prensa de que la Ejecutiva Regional ha acordado «comenzar a trabajar para lograr una transición ordenada en el próximo Congreso Regional» y «escuchar en las próximas semanas tanto a los órganos del partido como a la militancia para analizar y tomar las medidas necesarias que permitan volver a conseguir la confianza de la ciudadanía madrileña».
«Somos conscientes de que nuestro mensaje y nuestras propuestas no han llegado a la ciudadanía, pero trabajaremos para que, en los dos años que quedan para la próxima cita en las urnas, consigamos que confíen en nuestro proyecto de Comunidad de Madrid y depositen en nuestro partido toda su confianza para conseguirlo», añade el partido, que reconoce los «pésimos resultados» electorales.
La Ejecutiva Regional se ha emplazado a reunirse de nuevo la próxima semana para «tener un diagnóstico preciso de cuáles han sido los motivos de esta pérdida de apoyo en las urnas y empezar a trabajar de inmediato y sin descanso para volver a recuperarla».
Izquierda Socialista, la corriente más crítica del partido, había pedido la dimisión de la Comisión Ejecutiva Regional y la entrega del acta de Gabilondo con la intención de iniciar «un proceso de renovación de cargos y políticas».
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha adelantado una reunión de la Ejecutiva Federal del partido para este jueves, 6 de mayo, que, en principio, estaba planteada para el próximo lunes.
«Reflexión y trabajo»
Respecto al futuro de Gabilondo, el ministro y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha dicho este miércoles que es una persona «lo suficientemente madura» como «para tomar su propia decisión» y ha comentado que la dirección del partido está «muy agradecida» al «servicio que ha prestado».
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha reconocido la derrota «sin ambages» de su partido, que sacó 24 escaños y fue superado por Más Madrid en votos, pero ha tachado de «esperpéntica» la campaña del PP, alejada de rendir cuentas, presentar un programa o el «realismo».
En su opinión, los «elementos irracionales» de la campaña madrileña se quedan ahí, por lo que los socialistas no extrapolan la victoria del PP al ámbito nacional. «La victoria es de Ayuso, no de Casado, que tiene que decidir si el modelo de ultraderecha de Madrid lo quiere para el resto de España». El líder del PP, opina Calvo, «ha permitido que Ayuso lleve al contenido y a discurso más radical de la derecha española».
Calvo: «Ha ganado el PP con el discurso de Vox»
Los socialistas desligan el triunfo de la candidata del PP, que ha logado 65 escaños y podrá gobernar en solitario, con un cambio de rumbo en la política española y alejan la posibilidad de que el resultado de los populares en la Comunidad de Madrid pueda aupar las opciones de Casado para llegar a la Moncloa.
Aunque Calvo ha reconocido que que Madrid es «muy importante» en el escenario de la política española, la vicepresidenta primera cree que el resto de España «también existe». No opina lo mismo Emiliano García-Page. «Lo que está pasando va a tener consecuencias en el análisis político y social absolutamente imprevistas», ha valorado, por su parte, el presidente de la Castilla-La Mancha.
