La Fiscalía de Bolivia ha presentado este lunes una imputación formal contra el que fuera director de la agencia antidrogas en el país andino -bajo el Gobierno de Evo Morales-, el coronel Maximiliano Dávila, por enriquecimiento ilícito y vínculos con el narcotráfico.
Su detención se produjo el pasado sábado en la localidad fronteriza de Villazón, desde donde pretendía, según las autoridades, huir a Argentina. El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó de que Dávila es sospechoso de mantener vínculos con el narcotráfico, tal y como señaló una última investigación de la DEA, la agencia estadounidense antidroga.
«Dávila estaría siendo vinculado con el narcotráfico y ganancias ilícitas. La fiscalía considera que se tenían suficientes elementos y por eso se determinó su aprehensión», añadió.
Además de Dávila, también han sido imputados Ignacio Angus Nieto y Omar Rojas Echeverría, antiguo policía que tras desertar en 2014 pasó a ser una de las principales figuras del narcotráfico en el país, tanto que era considerado por algunos como el ‘Pablo Escobar boliviano’.
La imputación ha sido suscrita por la fiscal Lupe Zabala y presentada ante un tribunal de La Paz. En ella además se solicita la «detención preventiva en el penal de San Pedro por el plazo de seis meses», según el documento legal al que ha tenido acceso el diario boliviano ‘La Razón’.
