Al llegar al desayuno informativo, la presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha referido a la polémica de los últimos días, después de que se preguntara si el Gobierno iba a hacer «cómplice» al Rey por tener que firmar los indultos. Ayuso ha subrayado que no ha rectificado, que sigue pensando lo mismo que dijo y que es una absoluta vergüenza que el Gobierno haga firmar al Rey ese documento.
Ayuso ha negado que haya rectificado sus palabras: «Yo no hice ninguna rectificación, aclaré mis palabras, pero sigo pensando absolutamente lo mismo, que es una absoluta vergüenza que al Rey de todos los españoles, que es el enemigo a batir por los independentistas y por aquellos que quieran promover en España una ensoñada república, tenga que firmar semejante documento».
La presidenta madrileña ha elogiado la figura del Rey, «una persona que simboliza la unidad y la igualdad de todos los españoles, la persona que lideró y que arrojó luz y verdad el 3 de octubre». «Me sigue produciendo el mismo sonrojo y bochorno y humillación que el Rey de España tenga que firmarlo», ha insistido.
«La institución de la Monarquía y el Rey están muy por encima de la Comunidad de Madrid y la mía y haré todo lo que esté en mis manos para protegerla», ha asegurado.
Ayuso ha confirmado que ha hablado con Casado, como hace todos los días, y ambos han constatado que tienen la misma opinión en este asunto, a pesar de que el líder del PP corrigió claramente las palabras de la presidenta en funciones.
«Casado y yo pensamos lo mío, exactamente lo mismo, que es una humillación y una vergüenza que el Gobierno y los independentistas que han llevado a Cataluña a una situación de conflicto civil, solo evitado por la otra parte, que esa gente, que está riéndose de todos los españoles, esos políticos celebran absolutamente haberle puesto al Rey en una trampa», ha remarcado.
«Por eso le quieren hacer cómplice», ha insistido Ayuso, quien acto seguido ha aclarado que «por supuesto no lo es».
«Lo que está pasando es una humillación y una trampa para todos, y en especial para el Rey», ha subrayado, y ha hecho responsable al presidente del Gobierno.
