La obsesión del Gobierno con el feminismo y la perspectiva de género llega a límites insospechados. Si la nueva ley de Educación contempla hasta la enseñanza de Matemáticas con perspectiva de género, ahora es la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, la que denuncia un urbanismo «masculinizado» y se compromete a corregir el «sesgo de género» que tienen las ciudades.
«Es fundamental incorporar esa visión más humana en la que reforcemos la perspectiva de género. Estas políticas muchas veces se han asociado con una manera de entender el mundo y las ciudades desde un prisma mucho más masculinizado», insiste Raquel Sánchez en una entrevista en El Español.
La socialista, cuyo predecesor es José Luis Ábalos, denuncia que el suyo es un ministerio que «tradicionalmente ha sido muy masculinizado» y explica que lo importante no deben ser las infraestructuras en sí mismas, «sino qué es lo que se pretende conseguir con ellas». «Las estaciones hay que situarlas en lugares céntricos que den seguridad a las mujeres«, asegura Sánchez que, sin embargo, no ofrece ningún ejemplo más de las políticas que, a su juicio, contribuirían a acabar con ese supuesto «sesgo de género» que lamenta una y otra vez.
