La visita de Mohsen Rezai, vicepresidente para Asuntos Económicos de la República Islámica, circulado por la Interpol por terrorismo, y las relaciones de Daniel Ortega con Irán, principal Estado patrocinador del terrorismo en el mundo, convierten a Nicaragua en un Estado promotor del terrorismo, afirmó el exasesor del Congreso de Estados Unidos, Jason Poblete.
El investigador del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington (CSIS) y consultor en temas de seguridad nacional, Douglas Farah, coincide con ese argumento.
“De hecho, es estado protector del terrorismo”, afirma con aplomo Farah para explicar que parte de la alianza entre Ortega y el régimen de Irán. Les permite realizar entre gobiernos actividades ocultas para sus propósitos como levantar requerimientos de visas, expedir pasaportes, incluido los diplomáticos, y realizar vuelos directos no declarados, entre otras “colaboraciones”.
Rezai fue uno de los pocos invitados de “relevancia” que asistió a la “investidura” de Ortega, que ha fortalecido relaciones con Irán, restableció relaciones diplomáticas con China, y las afianza con Rusia en un contexto de aislamiento internacional por violaciones a los derechos humanos y tras el fraude electoral de noviembre en el que participó sin rivales (a quienes mantiene encarcelados en las mazmorras del régimen).
Rezai, excomandante de la Guardia Revolucionaria iraní esta circulado por la Interpol, es uno de los implicados en el atentado terrorista contra el centro judío Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en Buenos Aires, Argentina, en 1994, en el que perecieron 85 personas y más de 300 resultaron heridos.
En 2019, el régimen sandinista aprobó el libre visado para los iraníes, en el marco de un “acuerdo” comercial entre ambos países. Fuentes militares han revelado que a Nicaragua han ingresado vuelos procedentes de Irán, sin control.
Poblete considera que los enlaces de Ortega con Irán representan una amenaza para la región, especialmente para Estados Unidos.
“Esos enlaces en el hemisferio de cualquier funcionario de un gobierno terrorista y que esta circulado por actos de terrorismo es una amenaza y un peligro para Estados Unidos”, subrayó Poblete.
Y es que Rezai durante su visita de cuatro días a Nicaragua dejó claro el objetivo de la visita. «Cuando nos dimos cuenta que Estados Unidos ha empezado una amenaza contra ustedes, sentimos una obligación de venir y declarar que Irán está con Nicaragua», dijo el alto funcionario iraní.
Afirmó que su país tiene «toda la disposición de colaborar y cooperar para que podamos vencer al imperialismo norteamericano«. Rezai era el excomandante de la Guardia Revolucionaria iraní al momento del atentado criminal contra AMIA.
Irán esta reactivando sus enlaces en la región, sostiene Farah. “Lo que nosotros hemos visto es que cuando hay presión, especialmente económica comienzan a activar todas las células que tienen ahí dormidas, son grupos muy vinculados a Hezbollah, al narcotráfico, al crimen organizado y si fuera necesario en algún momento se podrían convertir en células militares. El punto en este momento es ganar dinero y tratar de salir de la presión de las sanciones tanto en Nicaragua como en Irán”, afirmó el especialista.
“Todo esto tiene múltiples propósitos, las estructuras que ellos han montado en sus centros culturales, en sus mezquitas, embajadas donde es fácil convertir eso en un arma militar si fuese necesario”, acotó Farah.
El Departamento de Estado de Estados Unidos ubica a Irán como el principal patrocinador del terrorismo en el mundo. Un informe revela que desde 1979, la República Islámica de Irán ha establecido una política de estado para dirigir, facilitar y llevar activamente a cabo actividades terroristas a nivel mundial.
A diferencia de casi cualquier otro país, la República Islámica ha apoyado el terrorismo dentro de sus propios aparatos militares y de inteligencia. A través de su fuerza Qods del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC-QF), la rama extraterritorial del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) y el Ministerio de Inteligencia y Seguridad (MOIS). Irán lleva a cabo ataques, asesinatos y apoya la conspiración terrorista.
“El IRGC-QF encabeza el apoyo de Irán a los representantes y operaciones terroristas fuera de Irán. La organización se asegura de que la continuación de la Revolución en el país y en el extranjero, como está escrito en el preámbulo de la constitución iraní, se aplique plenamente. Irán usa sus agentes MOIS para la recopilación de inteligencia y operaciones clandestinas fuera de Irán”, revela el informe elaborado en 2018.
Rezai se paseó por el hemisferio y regresó a Irán sin dificultades después de dar el espaldarazo a su aliado en la región. “Estas personas deben ser bloqueadas, el problema con Nicaragua es que Ortega no coopera con nosotros”, dijo Poblete para agregar que el dictador sandinista “instiga e invita a esos enlaces para crear tensiones con Estados Unidos”.
El experto considera que las acciones de Ortega son coordinas con lo que llama el “eje del mal” Rusia, China, Venezuela y Cuba. “Hay intereses económicos que pasan por Nicaragua”, apuntó, asegurando que Estados Unidos no le ha dado la importancia que requiere porque no ha puesto en la captura de terroristas como Rezai.
El jefe de la diplomacia estadounidense Antony Blinken expresó “seria preocupación” por la reciente de visita a Rezai a Nicaragua. Poblete estima que, si Daniel Ortega sigue promoviendo “este tipo de enlaces” con terroristas iraníes, Nicaragua podría ingresar a la lista de países promotores del terrorismo.
