En lo que supone ya un nuevo enfrentamiento entre los partidos del Gobierno de coalición, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido muy clara este lunes al afirmar que las personas transexuales “no pueden esperar” y ha pedido por ello al PSOE que “desbloquee de una vez” la ley trans.
Justo el día en el que se ha conocido el manifiesto firmado por más de 1.600 militantes y simpatizantes que critican la ley que ha diseñado el Ministerio de Igualdad, en una entrevista en la radio pública, Montero ha hecho especial hincapié en que “sus derechos no son negociables y van a ser ley” y que si le pide al PSOE “que desbloquee ya la ley trans” es porque “la forma que tiene el gobierno de debatir las iniciativas legislativas con la sociedad civil es precisamente su tramitación”.
Pese a que la titlar de Igualdad ha admitido sus diferencias con la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, por la ley trans, y de ser acusada por los militantes de Podemos de imponer una posición “única e inamovible”, Montero ha expresado su deseo de iniciar la tramitación del proyecto de ley para “poder ver cuál es el debate público y escuchar a todo el mundo con la oficialidad y rigor que exige una ley de gobierno”.
Quizá para acallar las críticas dentro de su propio partido, la ministra de Igualdad ha subrayadoel “firme compromiso” de Unidas Podemos con lo derechos de las personas transexuales. Y sobre la falta de consenso, ha recordado que la determinación de género “se ha debatido en cada proceso congresual y está presente en cada documento de programa electoral” de la formación que sustenta el Gobierno de coalición.
Un 8-M diferente
Después, en el acto institucional con motivo del Día Internacional de la Mujer, en el que ha participado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la ministra de Igualdad ha subrayado que España debe seguir siendo un referente internacional de políticas públicas feministas: «España debe seguir siendo un referente internacional de políticas públicas feministas, debemos estar a la altura de las mujeres de nuestro país y de su movimiento feminista».
Irene Montero ha reconocido que este 8 de marzo es «diferente», peor ha dicho que «nada puede impedir saber la fuerza que tienen las mujeres cuando se juntan codo a codo para defender la vida». Ha pedido por ello hacer «más feminismo que nunca» a través de una «agenda feminista» que «ponga la vida en el centro», erradique todas las violencias machistas, garantice la conciliación y revierta los recortes en dependencia: «España no puede seguir construyéndose con las mujeres en una esquina, en los márgenes, no puede permitirse que unas pocas rompan techos de cristal mientras la mayoría, las humildes, las pobres, las migrantes, siguen atadas a un suelo pegajoso que las condenan para recoger cristales».
Montero ha homenajeado este Día Internacional de la Mujer a las mujeres que han sostenido la vida en un año de condiciones especialmente difíciles: las sanitarias, las limpiadoras, las trabajadoras de supermercados y de la cadena de alimentación, las madres, las abuelas y las trabajadores del hogar.
