No es ningún secreto que Mediaset está renovando su imagen y, con ella, su plantilla también. Después del despido fulminante de Paz Padilla, que ha regresado a la cadena, llegó la salida de Carlota Corredera y la de David Valldeperas, ambos directores de Sálvame. Una retirada de la parrilla que no fue del todo cierta.
En una de tantas remodelaciones del grupo ubicado en Fuencarral, David Valldeperas tuvo que decir adiós al programa conducido por Jorge Javier Vázquez. «Estoy un poco triste porque dejo esta silla después de tantísimos años, pero también con ganas de cambiar y de otras historias», dijo entonces.
Pero nunca llegó a irse. Tal y como informó Look, el periodista ha continuado dirigiendo el espacio televisivo en la sombra, ganando así la batalla al que un día fue su amigo, Raúl Prieto. El otro exdirector de Sálvame también se vio obligado a decir adiós a su puesto para apostar por Viva la vida; una guerra abierta que parece continuar a día de hoy. Sin embargo, Valldeperas se enfrenta a su futuro más incierto, ya que bien es conocido que Telecinco afronta sus horas más bajas de audiencia.
El último baile de sillas
Quien sí se ha desvinculado por completo de Mediaset ha sido Prieto. Uno de los rostros habituales de la cadena desde hace más de 20 años ha tenido que pronunciar el adiós definitivo para «abrir nuevos caminos profesionales» con un cierre de etapa en buena sintonía. O eso ha querido hacer ver.
Lo cierto es que su salida ha sido más forzosa que otra cosa. Con un contrato indefinido desde hacía tres años, el exdirector de Viva la vida se ha visto obligado a despedirse para siempre de la cadena que le ha visto crecer, coincidiendo con el comienzo de una nueva era lejos de Paolo Vasile y en la que Alessandro Salem y Massimo Musolino han cogido el mando.
2017, el año que lo cambió todo
Se termina así una guerra entre los dos presentadores más queridos de Mediaset que se remonta años atrás. Si bien es cierto que mantuvieron una relación de amistad que traspasó las pantallas, en 2017 todo se truncó.
Raúl Prieto salió de forma tormentosa de Sálvame tras un fuerte desencuentro con Jorge Javier Vázquez, el cual se quejó del reparto publicitario que se estaba haciendo. Para limar asperezas, el conductor del programa organizó una cena con Prieto y Valldeperas, en un intento de explicar lo que le molestaba y dejar a un lado sus diferencias. Pero nada más lejos de la realidad.
Tal y como informó Look, Prieto fue el más beligerante con la manera de actuar de Jorge Javier, lo que le costó la salida forzosa de su programa. Tras esto, fichó por Cuarzo para dirigir Viva la vida, comenzando así una guerra abierta de productoras que fue llevada al terreno personal: un enfrentamiento entre los que un día fueron íntimos amigos en el que su ego fue más importante que sus intereses laborales.
Una guerra fría
«Estamos ante una guerra de productoras que luchan por posicionarse dentro de la cadena. Al final no dejan de ser competencia y que le vaya mal a un programa de otra productora significa que queda libre un hueco que puede ser ocupado por un programa propio», compartió Semana.
Desde entonces, ni rastro de esa amistad de la que un día fardaron y compartieron con Carlota Corredera. El trió que dirigió Sálvame hasta llevarlo a lo más alto, y que tuvo que desvincularse del programa cuando cayó en picado, ya no existe ni existirá más. Se ha acabado la guerra dejando dos grandes perdedores.
