Ricardo Pascoe -experto en política internacional y embajador de México en Cuba (2000-2002)- asegura que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, sostiene una estrecha relación con el narcotráfico, con cárteles de la droga, para beneficiar al partido MORENA y que es sumamente maligno para la democracia y la seguridad, ya que equivale a ceder el control de vastos territorios a una suerte de «estado alterno» que nadie podrá ya controlar.
En esta entrevista concedida a La Gaceta de la Iberosfera, señala que AMLO es un gobernante con afán de dirigir todo personalmente y que nadie tenga voz propia, ni siquiera los altos funcionarios de su Gobierno. «Él decide todo, es el mandamás, él pacta y acuerda todo». Y añade que López Obrador ha decidido ser el interlocutor con el crimen organizado en México y específicamente con el narcotráfico y, por ello, viajado insólitamente varias veces a Badiraguato, la cuna del Cartel de Sinaloa, la casa del Chapo Guzmán y donde actualmente vive la madre del Chapo Guzmán, a quien saludó públicamente en una visita.
«Ha ido varias veces. Va para acordar él concretamente los términos de cómo se van a conducir [las negociaciones]. La última visita que hizo que fue antes de las últimas elecciones [celebradas el pasado mes de junio] fue precisamente para acordar los términos de la participación de los carteles [especialmente el Cartel de Sinaloa] en el apoyo a su partido para que ganara gubernaturas y diputaciones en los estados donde él creía que su partido no tenía suficiente estructura», señala Pascoe, miembro del movimiento opositor «Sí por México».
En este sentido, subraya que en los estados en los que gana MORENA se ha incrementado la violencia por la entrada de los carteles ganadores e incide en que «mueren más personas en México que en Siria». «La situación solo puede explicarse a través de un entendimiento que permite al crimen organizado avanzar en sus propósitos».
Así, recuerda que AMLO ordenó personalmente la liberación de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Chapo Guzmán, cuando estaba detenido e iba a ser extraditado a Estados Unidos. Y afirma que haber incluido el narcotráfico en la estructura política de toma de decisiones es el mayor error histórico del Gobierno de AMLO y concluye que será difícil salir de ahí porque «ya metieron el lobo en casa».
