Sergio Sayas y Carlos García Adanero se han sumado al Partido Popular de Navarra para «garantizar una alternativa real e ilusionante» al socialismo y a Bildu en la comunidad foral. Por ello, su «Plataforma Navarra» se presentará con el PP a las próximas elecciones autonómicas y municipales bajo las siglas de los populares.
Estos dos diputados navarros le plantaron cara a Pedro Sánchez. Ambos fueron expulsados de UPN durante dos años por votar en contra de la reforma laboral del PSOE en el Congreso el pasado 3 de febrero de 2022. Los dos representantes navarros en las Cortes desobedecieron ese día la orden de la cúpula de su partido que les ordenó votar que sí después de que Javier Esparza, líder de UPN, hubiera llegado a un acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez.
El PP y los dos diputados han firmado un acuerdo en el que recogen la «defensa de la foralidad de Navarra» frente a los ataques de los nacionalistas y los proetarras que buscan someter a la comunidad al País Vasco, y la defensa de «la libertad y la Constitución».
La unión entre Sayas y Adanero con el PP se ha confirmado tras un encuentro en Pamplona al que han asistido ambos diputados, el presidente del PP de Navarra, Javier García y la secretaria general, Amelia Salanueva.
«El único que puede garantizar que no va a haber un gobierno con el PSOE, que pacta con Bildu, es el PP de Navarra», ha sentenciado García después de que Sayas asegurase que «el acuerdo ofrece una alternativa fuerte y real». «El centro derecha se tiene que creer que es una alternativa real y hoy es un paso importante», ha explicado Adanero en la rueda de prensa posterior al acuerdo.
Esparza y su acercamiento al PSOE
Esta reunión se produce después de que el pasado diciembre Javier Esparza, líder de Unión del Pueblo Navarro, anunciase que la Ejecutiva de su formación había decidido ir en solitario a las próximas elecciones forales alejándose así del PP y dejándose la puerta abierta para pactar con los socialistas.
Cabe destacar que el acercamiento de Esparza al PSOE comenzó hace más de un año cuando llegó a un acuerdo con María Chivite, líder del PSN, para apoyar la reforma laboral del Gobierno.
Tras tomar esa decisión, Esparza aseguró que «si alguien creía en este país que UPN era el monaguillo del Partido Popular, esto no va así», y reivindicó que la formación regionalista tomaba sus propias decisiones «en esa tierra» y era la «única alternativa» al actual Gobierno foral.
Desde el Partido Socialista de Navarra también han criticado este movimiento. La presidenta del Gobierno foral, María Chivite, ha asegurado que «queda feo dar cobertura a tránsfugas», pero que «negociar con dos personas que son tránsfugas es un poco la dinámica que lleva el PP, que lo hizo en Murcia».
