La reunión extraordinaria entre ERC y JxCat en la cárcel de Lledoners (Barcelona) para intentar alcanzar un acuerdo para la formación del nuevo Govern ha terminado poco antes de las 21.00 horas de este martes.
Tras casi cuatro horas de reunión han salido por la puerta de Lledoners algunos de los dirigentes de ambos partidos que han participado en la cumbre, en la que han abordado la estructura de gobierno, a partir de una propuesta elaborada por ERC.
Ha sido la primera vez que el candidato de ERC a la presidencia de la Generalidad, Pere Aragonès, se ha sentado a negociar directamente con el secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, preso en Lledoners.
A Aragonès lo han acompañado el presidente de ERC, Oriol Junqueras, preso en Lledoners, y Josep Maria Jové, uno de los miembros del equipo negociador de los republicanos, mientras que junto a Sànchez han acudido Elsa Artadi y Josep Rius, dos de los negociadores de JxCat.
Esta reunión se celebraba a casi un mes de que expire el plazo límite -el 26 de mayo- para la formación de un nuevo Govern -de lo contrario se deberán convocar elecciones- en un gesto de ERC, que quiere acelerar unas negociaciones que avanzan con lentitud.
ERC maneja como tope para el acuerdo la fecha del 1 de mayo, pero en JxCat no aprecian esta urgencia. De hecho, la consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, ha animado a los negociadores a tomarse «el tiempo necesario» para alcanzar «no un acuerdo de investidura, sino un buen acuerdo de legislatura».
