Inicio Actualidad Tormenta en el fútbol español por la improvisación con Filomena

Tormenta en el fútbol español por la improvisación con Filomena

La tremenda nevada que se cebó especialmente con el centro de la Península provocó un sábado de locos en el fútbol español, donde desde primera hora de la mañana se sucedieron llamadas telefónicas, negociaciones al más alto nivel y comunicados que acabaron desembocando en el cambio de fechas de varios partidos programados para este fin de semana. También hubo suspensiones. Un día intenso, de frío y de muchísimos nervios para los responsables de la Federación y LaLiga, pero también de enfado en clubes como el Real Madrid, que el viernes sufrió una odisea en el aeropuerto de Barajas en su camino hacia Pamplona y que este sábado tuvo que permanecer pendiente durante toda la jornada ante la posibilidad de un aplazamiento de su encuentro ante el Osasuna. El blanco no fue, sin embargo, el único equipo disgustado, de puertas para dentro, por la gestión de esta crisis meteorológica.

Aunque se llevaba advirtiendo desde hace días de la extrema fuerza de Filomena, la borrasca pareció pillar con el pie cambiado a los dirigentes del fútbol. En la Comunidad de Madrid, donde estaba activada la alerta roja, comenzó a nevar con fuerza el viernes a mediodía, pero la Federación no anunció hasta las primeras horas de la noche la constitución de una «Comisión de Crisis» para abordar la suspensión de partidos de competiciones de ámbito estatal. Un ejemplo de la sensación de improvisación que transmitieron los dirigentes del fútbol porque cuando se oficializó la suspensión del Mirandés-Rayo, el conjunto vallecano ya se encontraba atrapado por culpa de la nieve.

«Cinco horas de autobús atascados para avanzar 20 km y volver, cada uno como puede a un lugar seguro para dormir. Un sin sentido que te hace pensar si de verdad se preocupan de la salud y seguridad de la gente o somos unas simples marionetas dirigidas», denunció en sus redes sociales el jugador franjirrojo Óscar Valentín después de regresar a la capital. De nuevo en Vallecas, volver a sus domicilios resultó una odisea para los jugadores rayistas.

El malestar de los actores del fútbol español apuntó hacia la RFEF y LaLiga porque, además del Rayo, otros equipos también vivieron situaciones para muchos evitables teniendo en cuenta los vaticinios meteorológicos que existían desde hace días. El avión del Athletic no pudo aterrizar el viernes en la capital y tuvo que regresar a Bilbao. Aunque las previsiones apuntaban a que la nieve seguiría cayendo con fuerza durante la mañana del sábado en Madrid, la suspensión del partido ante el Atlético no se produjo hasta primeras horas de la mañana, una demora que provocó extrañeza en ambos clubes. El 10 de marzo aparece ahora en el horizonte como fecha para ese duelo.

Un enfado que se hizo mucho más patente en el caso del Real Madrid, que tenía previsto viajar el sábado por la mañana a Pamplona y que se vio obligado a adelantar el desplazamiento a la tarde del viernes a petición de la Liga. Un viaje caótico que comenzó cuando la nevada en la capital era ya gigantesca y que provocó que el avión del conjunto blanco tuviera que permanecer más de tres horas parado en la pista del aeropuerto de Barajas.