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Un sindicato policial denuncia a Echenique ante la Fiscalía por “incitar” a los disturbios por Hasel

El sindicato Confederación Española de Policía (CEP) ha presentado este lunes ante la Fiscalía del Tribunal Supremo una denuncia contra el portavoz en el Congreso de Unidas Podemos, Pablo Echenique, por «incitar o reforzar» a quienes participaron en los disturbios para pedir la libertad del rapero Pablo Hasel. Lo hizo en un comentario en Twitter el pasado 17 de febrero cuando ya se estaban produciendo las algaradas, actos vandálicos y saqueos a los comercios.

Más concretamente, el sindicato policial explica que el tuit se publicó a las 21:18 horas: «Ya era de dominio público la situación de violencia que estaban provocando los asistentes a la concentración no comunicada». Este hecho se refiere a las manifestaciones en la Puerta del Sol y calles aledañas del centro de Madrid.

La denuncia de la CEP no es la primera que recibe Echenique, ya que, a parte de las quejas de otros sindicatos policiales, Alternativa Sindical de Policía (ASP) registró una primera denuncia en una comisaría de Madrid, pidiendo que se diera traslado al juzgado de instrucción en funciones de guardia.

Igualmente, otros sindicatos de la Policía como JUPOL o el SUP también han pedido ya por la intervención de la Fiscalía.

Nada más conocerse la denuncia, el propio portavoz de Podemos en el Congreso ha querido explicarse y disculparse en TVE por ese «apoyo a los jóvenes antifascistas» argumentando que «es evidente que nadie apoya la quema de contenedores» y que «manifestarse a favor de la libertad de expresión es algo que todo demócrata debería defender».

CEP reprocha precisamente a Echenique «todo su apoyo a los jóvenes antifascistas» y entiende que pudo incurrir en un delito por incitar a la violencia, según los artículo 557 y 559 del Código Penal. Del mismo modo, hace especial hincapié en que cuando el portavoz de Podemos publicó su tuit, ya se había dejado constancia del lanzamiento de objetos a los policías y la quema de mobiliario urbano en diferentes ciudades, entre ellas Vigo, Tarragona, Barcelona, Gerona, Lérida y Granada.

Subraya el sindicato que «no cabe duda, en definitiva, de que los protagonistas de esos altercados recibieron un respaldo público cualificado que se constituyó en un elemento reforzador de esos actos vandálicos».