Inicio Actualidad Vox abandona el Congreso tras exigirle la Presidencia que retirara una acusación...

Vox abandona el Congreso tras exigirle la Presidencia que retirara una acusación de «filoetarras»

La diputada de Vox Patricia Rueda conversa con Alfonso Díaz Rodríguez de Celis este martes en el Congreso.. / EFE

En plena polémica por la crispación en el hemiciclo, el vicepresidente de la Cámara retiró el uso de la palabra a la diputada Patricia Rueda tras ser advertida en tres ocasiones

Miguel Ángel Alfonso

El Congreso debatía este martes por la tarde sobre la candidatura de Málaga como sede de la Exposición Universal de 2027 cuando la diputada de Vox Patricia Rueda afirmó que el Gobierno «premia a filoetarras y terroristas», en clara alusión a EH Bildu y su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado. El vicepresidente primero de la Cámara baja, Alfonso Rodríguez Díaz de Celis, que en ese momento ejercía la presidencia en el hemiciclo, ha llamado la atención a la parlamentaria y le ha pedido que se retractara, algo que la parlamentaria ha rehusado hacer, hasta que le ha sido retirada la palabra tras las tres advertencias de rigor. «Me estás coartando», le ha afeado a Díaz de Celis antes de abandonar la tribuna.

Los diputados del resto del grupo parlamentario de Vox, que habían estado aplandiendo durante los dos minutos en los que Rueda había estado en silencio frente al atril, decidieron abaondar el hemiciclo cuando el vicepresidente primero le retiró el turno de palabra a Rueda. Más tarde su presidente, Santiago Abascal, compareció para denunciar «el asalto del Gobierno a todas las instituciones». Los diputados de la formación regresaron minutos después a la sesión.

El hecho se produce una semana después de la polvareda levantada por las alusiones lanzadas desde Vox a la ministra de Igualdad, Irene Montero, en la que relacionaban su cargo actual con su pareja, el exvicepresidente segundo, Pablo Iglesias. En aquella ocasión, la dirigente de Podemos pidió que la «violencia política» ejercida en «la sede de la soberanía popular» permaneciera en el diario de sesiones «para que no se borre». «Para que después de mí no venga ninguna», ha subrayado.

La propia Batet había pedido por la mañana a todos los grupos que guardaran el debido decoro en el Congreso y lo sucedido este martes evidencia que la presidencia de la Cámara ha tomado una actitud más severa con esta clase de términos que, hasta ahora, se producían prácticamente de forma diaria.

Lo que no tiene visos de prosperar, por ahora, es la petición de reformar el código ético para los diputados y los periodistas, como había planteado En Comú Podem, ni se retocará el actual Reglamento del Congreso