CARACAS
En medio de una extrema tensión, política y social, con violencia en las calles de Caracas y otras ciudades venezolanas, que al cierre de esta edición ya se habría cobrado al menos 13 víctimas fatales y varios heridos y detenidos, el presidente de la Asamblea Nacional (el Parlamento unicameral del país), Juan Guaidó, se proclamó ayer presidente interino de Venezuela, con el reconocimiento de Estados Unidos, Argentina, Brasil y otros países de América, incluido el titular de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro. Enseguida, el mandatario chavista, Nicolás Maduro, llamó a no rendirse y a dar combate. También anunció la ruptura de relaciones con el gobierno de Donald Trump.
“Juro asumir formalmente las competencias del Ejecutivo Nacional como el presidente encargado (interino) de Venezuela para lograr el cese de la usurpación, un gobierno de transición y tener elecciones libres”, dijo Guaidó ante una multitud de seguidores en el este de Caracas, donde hubo multitudinarias marchas, de ambos bandos.
Juan Gerardo Guaidó Márquez, que tomó el liderazgo de la oposición venezolana, es ingeniero y en la actualidad diputado nacional del partido Voluntad Popular por el estado de Vargas. Desde el 5 de enero de 2019, ejerce como presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, con apenas 35 años.
Estados Unidos y once de los 14 miembros del Grupo de Lima habían pedido que Guaidó (por encabezar la Asamblea Nacional) se hiciera cargo del Ejecutivo en forma interina al no reconocer el segundo mandato de Maduro y hasta convocar a nuevas elecciones, por considerar que ese cuerpo legislativo es el único elegido en forma democrática en el país caribeño.
Poco después, Maduro desde el presidencial Palacio de Miraflores y frente a sus seguidores, desafió: “Hoy el gobierno imperialista de Estados Unidos dirige una operación para imponer un gobierno títere a sus intereses… Pretenden elegir y designar al presidente de Venezuela por vías extra constitucionales”, dijo. “Aquí no se rinde nadie, aquí no se raja a nadie… aquí vamos al combate”.
A la tensión política se sumó la agitación en las calles. Enfrentamiento entre policías antimotines y opositores, saqueos y otros disturbios dejaban al menos trece muertos, según el último balance del Observatorio de Conflictividad Social (OVCS), una Ong opositora.
Anoche la tensión continuaba en las calles venezolanas.
Las movilizaciones se iniciaron desde diferentes puntos de Caracas en un intento de la oposición por demostrar que recuperó su fuerza en las calles y que logró reagruparse para enfrentar al gobierno de Maduro en el inicio de su segundo sexenio. A su vez el presidente, agobiado por crecientes presiones internacionales, también llamó a marchas similares en una nueva medición de fuerzas.
Desde el amanecer, la policía tomó algunas calles del centro y el este de la capital donde se realizaron las marchas. La noche del martes se registraron por segundo día consecutivo algunas protestas callejeras en algunas barriadas pobres del norte y el oeste de la capital en rechazo al gobierno de Maduro, reportaron medios locales. Se registraron al menos 4 muertos y se quemó una estatua de Hugo Chávez.
Las multitudinarias marchas de ayer por la tarde fueron la primera gran pulseada en las calles venezolanas desde las protestas que dejaron unos 125 muertos en 2017. Anoche había una fuerte represión policial, según la oposición. Y desde el oficialismo se denunció saqueos, en medio de un caos generalizado.
¿Quien gobierna?
Guaidó dijo estar facultado por la Constitución y contar con el apoyo internacional para asumir como “presidente encargado”. Dijo: “Hoy doy el paso, entendiendo que estamos en dictadura”.
Poco antes de la autoproclamación de Guaidó, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ, de línea oficialista) ordenó a la Fiscalía investigar penalmente a los integrantes del Parlamento, al acusarlo de usurpar las funciones de Maduro, quien anoche tuiteó: “Llamo al pueblo aguerrido y combatiente a estar alertas, dedicados por una parte al trabajo y al estudio, y por la otra, movilizados para defender la estabilidad de la Patria. ¡Ni golpismo, ni intervencionismo, Venezuela quiere paz!”.
Un funcionario del gobierno de Trump advirtió que “todas las opciones están sobre la mesa” para considerar medidas si Maduro responde “con violencia” contra el Parlamento. (AFP, AP y EFE)
