El presidente Alberto Fernández sostuvo hoy que su presentación ante el Congreso nacional fue con sus «convicciones intactas» y con «la humildad de quien puede reconocer errores y logros compartidos». Entre los temas más importantes tocó el de la Justicia y al respecto manifestó que el Poder Judicial «está en crisis». Es por ello que anunció una reforma del Poder Judicial y la creación de un tribunal para limitar el poder de la Corte Suprema. «Es una demanda impostergable de la sociedad» remarcó, a lo que agregó que «sus funcionarios gozan de privilegios», como el no pago del Impuesto a las Ganancias. «En el caso de los miembros de la Corte Suprema de Justicia acceder a sus declaraciones juradas es casi imposible», sostuvo mientras pedía que sus dichos no fueran vistos «con rencor».
Habló de «decisiones judiciales llamativas», de «condenas mediáticas instantáneas» y que «vivimos tiempos de la judicialización de la política y la politización de la Justicia».
Por otro lado, al dar inicio a su mensaje ante la Asamblea Legislativa, dijo que «tenemos la certeza de que unidos pudimos dar pasos históricos para mitigar los efectos negativos de la pandemia que aún nos asola». Una de sus primeras palabras fue pedir «reflexión colectiva» a las «fuerzas políticas y a la sociedad» en «circunstancias tan excepcionales» como las que se están viviendo en Argentina y en el mundo por la pandemia de coronavirus, recordando que su anterior mensaje, el año pasado, fue diez días antes que se declarara la pandemia, cuando llegó con la «voluntad inquebrantable de poner de pie un país que había quedado de rodillas» por la política de la gestión anterior.
«Afrontamos el incendio (en referencia a la pandemia) sabiendo que otros habían terminado con el agua», dijo, y apuntó que «en 2020» Argentina tuvo un «logro inmenso» al evitar «que se saturara el sistema de salud», algo que fue el «logro no de un gobierno sino de una Nación».
«La lucha contra las consecuencias del coronavirus ha sido en todo el planeta más extensa de lo que se pensó, pero ni un sólo día bajamos los brazos, ni ante el incremento de contagios ni ante la crítica injusta», planteó.
«Hemos iniciado el mayor operativo de vacunación de la Argentina. En este plan hay prioridades muy claras: las reglas se deben cumplir y si se cometen errores este presidente los va a corregir. Aún cuando en lo personal me causó dolor tomé la decisión que correspondía», afirmó, sin mencionarlo, a la reciente salida del ministro de Salud. «Todo gobierno sensible tiene la obligación de corregir los errores», apuntó.
«Nada es sencillo en el mundo con tanta incertidumbre y escasez de insumos críticos» ante la pandemia de coronavirus, pero destacó que Argentina «desde fines de diciembre está recibiendo, a un ritmo menor al que acordó contractualmente, dosis de la vacuna Sputnik V».
Tras ponderar que el Gobierno «dialoga con diferentes países que producen la vacuna» y desarrolla junto a México la vacuna de Oxford y AstraZeneca, el mandatario advirtió que «el 10% de los países acapara el 90% de las vacunas existentes».
En ese contexto admitió que «creció la pobreza y eso es una situación grave que vamos a revertir», y aseguró hoy que no llegó a la Presidencia «para ser sordo ante las críticas bien intencionadas» ni tampoco para dejarse «aturdir por sectores concentrados», pidió terminar «con la pirotecnia verbal que sólo nos aturde» y llamó a evitar que los esfuerzos hechos este año hayan sido en vano.
«Cuanto más profunda fue la crisis, más se templó mi espíritu», expresó y resaltó: «La inmensa mayoría de nuestro pueblo sabe que vamos en camino de la recuperación».
Además, destacó que «con firmeza y esfuerzo» su Gobierno ha «logrado la renegociación de la tóxica deuda privada». «Es voluntad terminante e imperiosa que afirmemos el compromiso de no permitir nunca más que se genere un endeudamiento asfixiante a partir de la toma de créditos irresponsables», dijo, al tiempo que espera que «algún día hagan un mea culpa» para así «levantar los cimientos del país que han derrumbado» durante la gestión anterior.
«Aún nos queda resolver la deuda con el FMI», y «es necesario que endeudarse no sea gratis. Por eso he instruido para que formalmente se inicien querellas criminales para determinar los autores de la mayor adminstración fraudulenta que nuestra memoria recuerda», al tiempo que indicó que «iniciaremos una investigación por la deuda otorgada por el FMI».
«No hay más lugar para un ajuste recesivo», señaló, adelantó que «la obra pública ha sido prioritaria y lo será aún más en 2021», en tanto que admitió que «la inflación es la principal evidencia de nuestras deficiencias». «Para nosotros la recuperación de los ingresos reales es un objetivo prioritario», agregó, momento en el que le pidió a los legisladores que aceleraran la aprobación del proyecto que eleva el mínimo imponible del Impuesto a las Ganancias.
Y anunció que van a estar enviando un proyecto de ley «para declarar la emergencia de los servicios públicos», para de esa forma «desdolarizarlos» y así lograr «que repercutan menos en las economías de los argentinos».
