El local de la esquina de Posadas y Cerrito, frecuentado por figuras públicas. Foto: LA NACION / Daniel Jayo
Simonetta Orsini, la joyería más frecuentada por políticos, jueces y empresarios, fue allanada hoy por una causa que investiga contrabando y evasión fiscal en la adquisición de joyas. Los funcionarios secuestraron 400 relojes, algunos superiores a U$100.000, como Cartier, Piguet y Breguet, entre otras marcas. Ninguna de esas joyas habrían ingresado oficialmente al país.
La AFIP denunció a Simonetta Orsini por una maniobra de contrabando que se realizaba con la importación de relojes. El mecanismo se realizaba en el Puerto de Buenos Aires, donde llegaban las joyas, que quedaban en una zona aduanera y eran retiradas sin pagar los tributos correspondientes. Después, esos mismos relojes eran ofrecidos, por ejemplo, en el coqueto local de la esquina de Posadas y Cerrito.
Desde su creación, Simonetta Orsini operó con dos socios: Myriam «Mimí» Kohen -esposa de del empresario kirchnerista Gerardo Ferreyra- y Martín de Leeuw, condenado en Estados Unidos por lavar millones de dólares de cárteles colombianos del narcotráfico.
Kohen aseguró el año pasado a LA NACION que ya no integra la sociedad, pero todavía frecuenta el lugar. En los registros de la Anses, además, aparece actualmente como empleada de Simonetta Orsini. Su marido, cercano al ex funcionario Carlos Zannini, fue uno de los empresarios más beneficiados durante el kirchnerismo. La últimas mega obras que ganó Electroingeniería SA con el anterior gobierno fueron las represas de Santa Cruz.
Los allanamientos, ordenados por el juez penal tributario Diego Amarante, se prolongaron ayer más de lo previsto por los funcionarios judiciales. Mientras intentaban secuestrar toda la información digital sobre los negocios de la joyería, los técnicos se sorprendieron cuando los servidores de la joyería fueron desconectados de manera remota, informaron fuentes judiciales. Los allanamientos, finalmente, se prologaron durante cuatro horas.
Los diez allanamientos se extendieron también a las firmas PS Group SA y Dajij SA por la misma metodología de contrabando de relojes de alta gama. Los procedimiento se extendieron también a cuatro locales en Recoleta, otro en el shopping Patio Bullrich, oficinas administrativas y un estudio jurídico.