Desde la ruidosa “sentada” con corte de calles, pasando por el abrazo simbólico hasta la manifestación virtual vía redes sociales, cientos de alumnos y alumnas de al menos 16 escuelas de la Ciudad reclamaron ayer por mejoras edilicias en los establecimientos a los que concurren.
Por ejemplo, los estudiantes de la Secundaria Nº 1 Manuel Belgrano, de 38 entre 8 y 9, se manifestaron en la aledaña Plaza Olazábal con múltiples denuncias: “Tenemos un gimnasio clausurado desde 2013, porque se inunda y tanto el tablero de luz como la caldera de gas quedan bajo el agua ”, advirtió Bárbara, que tiene 19 años y cursa 6º año. Agregó más falencias: “Baños que no dan a basto para 700 alumnos, filtraciones en techos, ventanas, sillas y mesas rotas”.
Una situación similar se dio en el Normal 1, donde un grupo de alumnos del nivel secundario salió a visibilizar sus urgencias con una “sentada” y corte de calles en la intersección de 14 y 51. “Pedimos sillas, salones dignos, más profesores”, puntualizó Francisco, que asiste a 4º año, tiene 15 años y es presidente del Centro de Estudiantes de esa institución.
También, jóvenes del Normal 2 protagonizaron una “sentada” en diagonal 78 y 4 para exigir una “rápida solución al deterioro edilicio”.
En el Albert Thomas, de 1 entre 57 y 58, los jóvenes cortaron la calle hacia el mediodía para reclamar por “el alto costo del comedor, que funciona en un buffet privado a $120 el menú”, explicó Ciro, 17 años y alumno de 6º. Remarcó que, “al ser una escuela técnica, hacemos doble turno, por lo que la comida se encarece aún más y si bien la cooperadora distribuye algunas viandas sin costo, no alcanzan para todos”.
Acaso, el reclamo más ruidoso por extremo haya sido el de la Primaria 64 “Cruce de los Andes”, de 41 entre 22 y 2. Allí, según denunciaron alumnos y padres, la falta de pupitres obligó a las autoridades a rotar los días de clases entre distintos cursos para que ningún chico se quede sin cursar. “Mi hija ya perdió cinco días de clases por este motivo”, denunció la mamá de una alumna de 2º grado, a la vez que alertó por la falta de profesores: “Necesitamos que solucionen ya estos problemas que perjudican la educación de nuestros hijos”, disparó.
Como se dijo, además de las “sentadas” y cortes de calles que, -sobre todo a la hora del cambio de turno- generaron trastornos en el tránsito, hubo otras manifestaciones: por caso, en el Liceo Víctor Mercante, de la UNLP, los alumnos realizaron una “afichada” en la puerta del colegio, mientras que en el Bachillerato de Bellas Artes optaron por un abrazo simbólico. Las protestas, que en algunos casos fueron apoyadas con mensajes a través de las redes sociales, se ramificaron en establecimientos como el Normal 3, el Nacional Rafael Hernández, la Media Nº 12, San Martín, Comercial, Estudiantes de La Plata, La Legión y Vergara.
Con la particularidad de cada reclamo, en el centro o en las zonas más alejadas de la Ciudad, las movilizaciones estuvieron cruzadas por el lema “sin educación pública no hay futuro” y el insistente pedido de un “mayor presupuesto”.
Ante las problemáticas planteadas, EL DIA consultó a las autoridades educativas bonaerenses, sin obtener respuestas.
