Crece la incertidumbre entre los gastronómicos ante más restricciones

En alerta, otra vez, a raíz del momento que atraviesa la gastronomía de la Región, al cual se le restringió, en principio, durante dos semanas, por el desenfreno en los casos de Covid, la atención de clientes dentro de los locales e incluso fuera de ellos después de las siete de la tarde, la Cámara de Comercio e Industria de La Plata se manifestó por la crisis que producen en el sector esas medidas.

“Otro año con pandemia y la sensación de que se repiten los errores y esa falsa dicotomía entre la salud y la economía”, se planteó desde la entidad que, a la vez apuntó a “la falta de anuncios” por parte del gobierno nacional para el sector, “poniendo en riesgo –se remarcó- miles de fuentes de trabajo”.

Según el diagnóstico de la Cámara, el 95 por ciento de los servicios gastronómicos de esta ciudad son emprendimientos de pymes, esto es de pequeñas y medianas empresas repartidas entre restaurantes, bares y cervecerías que, por lo general no supera ninguna los 20 empleados.

“Desde hace años vienen sobreviviendo a las diferentes crisis económicas que atraviesa el país. En el primer año de pandemia muchos tuvieron que cerrar sus puertas, este segundo año, sin ayudas reales para el sector, sería el tiro de gracia para la gran mayoría”, se aseguró desde la Cámara.

Frente a la posibilidad de un cierre total de la actividad con recepción de clientes en sus locales, la entidad anticipó que sólo quedarían los servicios de delivery y take away, los que representan, resaltó, “el 7 por ciento de la facturación total” de ese tipo de emprendimientos. De cumplirse ese pronóstico, se afirmó, “empeoraría la situación económica actual del sector y haría más urgentes las ayudas estatales”

De manera paralela al señalamiento de la caída económica que significaría una suspensión de la actividad, la Cámara subrayó la importancia de atacar la pandemia. “La situación sanitaria siempre está primero, no se discute, solo que también hay que atender la parte económica porque la falta de trabajo rápidamente repercute en la salud también”, añadió la institución.

Entre otros datos, se precisó que la actividad gastronómica emplea el 60 por ciento de los jóvenes entre 18 a 25 años y es el principal sector económico en promover el primer trabajo.

“Entendemos que en los momentos críticos de la pandemia hay que cerrar todo para eliminar la circulación. Pero tiene que haber una coherencia, no puede estar la gastronomía cerrada y un casino abierto, por ejemplo”, fue una de las quejas de la Cámara de Comercio, que recalcó, por otra parte que “el empresario pyme gastronómico sólo quiere trabajar, nunca pidió ayudas, pero si la situación sanitaria se lo impide necesita obviamente la presencia del Estado” y en ese sentido se reclamó una “implementación urgente del programa de ayuda ATP”, la “eximición del pago de cargas sociales y aportes patronales” y “subsidios en empresas de servicios”.

SEGÚN EL RUBRO

Daniel Alayán, vicepresidente segundo de la Cámara de Gastronómicos de La Plata, distinguió la repercusión de las medidas según el rubro. “Estas restricciones afectaron principalmente a las cervecerías, que están facturando un 5 por ciento de lo que facturaban en marzo; los restaurantes se defienden un poco con el servicio de los almuerzos, por eso ahora facturan entre un 20 y un 40 por ciento respecto al mes pasado”, dijo el dirigente.

Hace una semana, el gobierno nacional anunció la creación de un programa especial de asistencia frente a esta coyuntura para el sector gastronómico independiente. A través de ese plan se asistirá con 18.000 pesos por trabajador a las pymes del sector.

“El empresario pyme gastronómico sólo quiere trabajar, nunca pidió ayuda”, dicen en el sector

Según consignó Alayán, “no vemos ninguna asistencia concreta; estamos averiguando cómo iría a funcionar, pero hasta ahora la experiencia que tenemos de la edición anterior de esa ayuda es que ninguna empresa gastronómica pudo acceder”. El empresario solicitó, en ese sentido, que “se flexibilicen un poco las condiciones” y recalcó el “monto bajo” que significan 18.000 pesos por empleado.

Después de un largo tiempo de trabajar “a medias” (sólo con los sistemas de delivery y take away) debido a las medidas impuestas a partir de la circulación del coronavirus, al pasar la Región a fase 4 los espacios dedicados a la gastronomía reabrieron y comenzaron a trabajar nuevamente, al aire libre y con protocolos sanitarios en los salones. Así transcurrieron la primavera y el verano. A mitad de este abril, la actividad se desaceleró debido a los topes horarios y la imposibilidad de los locales de recibir público en el interior de sus instalaciones. El sector teme, además, que se adopten mayores restricciones.

PODRÍA SER CATASTRÓFICO

El panorama, ahora, con las limitaciones en tiempo y espacio para la actividad, resulta de por sí asfixiante, de acuerdo a las demandas del sector. Con nuevas restricciones, suponen que la situación podría ser catastrófica.

“Tenemos que abonar la parte más importante de los sueldos, más las cargas sociales, los alquileres, los servicios de Edelap y Camuzzi y a los proveedores. Si esto perdura la sangría va a ser enorme: ya se perdió un trabajador cada cuatro en el sector y esa proporción se puede duplicar”, dijo Alayán.

El dirigente de la Cámara de Gastronómicos aclaró que “no queremos contradecir las medidas sanitarias”, pero al mismo tiempo indicó que “nos sentimos muy desprotegidos si solamente se cierra la gastronomía y permanece todo lo demás, como las inmobiliarias y los cobros del alquiler, las cuentas de Edelap y Camuzzi y los proveedores, porque sentimos que es un parate sólo para los gastronómicos”.

Entre los comerciantes se extiende la sensación de que este año será peor que el anterior ante la posibilidad que se intensifiquen las restricciones. “En 2020 veníamos de años difíciles pero no dramáticos como fue el año pasado. Esa mochila jugará en contra para muchos emprendedores del sector”, remarcó una fuente consultada por este diario.

Ya perciben que la circulación de gente bajó sensiblemente en las últimas semanas, desde que este mes comenzaron las restricciones, el 9 abril último.

Los comerciantes esperan que las medidas se adopten con un criterio de no castigar con dureza al sector y llegue una asistencia posible de acceder, principalmente por cuestiones burocráticas y administrativas que han jaqueado el acceso a la ayuda el año pasado.