Por Mariano Spezzapria, desde el Congreso nacional
La sesión de la Cámara de Diputados en la que se debate el proyecto para legalizar el aborto transcurría esta tarde con intervenciones de legisladores que estaban a favor y en contra de la iniciativa, mientras en los pasillos del Congreso se realizaba un conteo extraoficial de votos que componía un escenario de extrema paridad y proyectaba un final abierto para resultado final.
De hecho, según pudo constatar EL DIA en la Cámara baja, el “poroteo” entre las distintas bancadas daba un empate en 121 votos hacia la una de la tarde, al tiempo que trece diputados permanecían en condición de indecisos. Entre ellos figuraban el riojano Luis Beder Herrera y el catamarqueño Gustavo Saadi, ambos del bloque del Frente para la Victoria kirchnerista.
La mención a esos diputados no era inocente: el FpV estaba mayoritariamente a favor de la legalización del aborto, como lo demostraban los legisladores sentados en sus bancas portando los característicos pañuelos verdes, bufandas de ese mismo color o simplemente vistiendo enteramente de verde. En el bloque de Cambiemos esa indumentaria no era tan ostentosa.
En la bancada oficialista, la que más integrantes contaba en contra de la legalización del aborto (como lo atestiguaron los discursos de la porteña Carmen Polledo y del cordobés Nicolás Massot), las diputadas portaban un pañuelo celeste más discreto, en tanto que las que están a favor como la bonaerense Silvia Lospennato, lucían el pañuelo verde pero colocado a manera de muñequera.
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En medio de la paridad que se verificaba en los conteos extraoficiales, crecía la posibilidad de que el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, tuviera que desempatar al momento de la votación. El legislador de Cambiemos, oriundo de Carlos Tejedor, seguía la sesión con una cruz y una imagen de la Virgen de Luján en su escritorio, ubicadas junto a la clásica campanilla legislativa.
Aunque Monzó no había dado ninguna pista sobre el sentido en que votará el proyecto, cuando llegue el momento de hacerlo entre las siete y las nueve de la mañana del jueves, según estimaron fuentes de la Cámara baja consultadas por este diario. Entre quienes están a favor del aborto, aseguraban que aún había varios “tapados” que inclinarían la balanza hacia la legalización.
