El impacto de la devaluación del peso provocará un aumento de las expensas en los próximos meses, ya que distintos rubros están ligados a valores cotizados en el dólar que desde el 12 de agosto en adelante tuvo un salto superior al 20 por ciento.
En algunos consorcios, con las expensas ordinarias de agosto ya llegó una suba del 9 por ciento por el aumento a los encargados de los edificios. Los que no llegaron a pagarlo lo harán el próximo mes.
En los edificios céntricos, el valor de la expensa ordinaria ronda los 3.000 pesos.
Pero la suba de la moneda norteamericana en nuestro país pegó de lleno en los servicios de ascensores, en los arreglos que tienen que hacer los inmuebles, la póliza de seguro y otros rubros que hacen a la vida cotidiana en los edificios de la Ciudad.
“Afecta bastante a las expensas en los edificios la suba del dólar. Por ejemplo, hay casos en los que se hicieron presupuesto de obras y servicios antes de las elecciones PASO y tras la devaluación del lunes 12 de agosto esos presupuestos quedaron a un lado y se hicieron nuevos con el nuevo valor de la moneda extranjera”, dijo una de las autoridades de la Cámara de Administradores de Consorcios de Edificios de la Ciudad.
Las subas que pueden venir en las expensas podrían tener un promedio de 20 por ciento en el caso de las extraordinarias, a raíz de las distintas alzas que tuvieron distintos rubros que componen ese pago al que sólo están incluidos los propietarios, según las normas vigentes.
Por ejemplo, el aumento en el pago de los servicios de ascensores tuvo un salto de hasta 30 por ciento, según informaron fuentes de la Cámara de Administradores local.
En el tema reparaciones y mantenimiento de edificios tuvo un alza menor en la mano de obra -hay algunos casos en los que mantuvieron los precios- y una disparada mayor en el de materiales.
El caso de las pólizas de seguro también tendrá un alza de entre el 20 y 30 por ciento porque se toma el valor del metro cuadrado de la construcción según una revista especializada y en la mayoría de los casos queda atado al valor de la moneda norteamericana.
En los próximos meses se aguardan subas también en los abonos, servicios y otras cuestiones cotidianas para el mantenimiento de cada edificio que aún no fueron ajustadas.
“Es pura incertidumbre cuánto costarán las expensas, pero lo cierto es que subirán el próximo mes, tanto en las comunes como en las extraordinarias, dependerá de cada consorcio”, remarcaron en la Cámara de Administradores.
En tanto, desde la Cámara de Empresarios de Ascensores de La Plata informaron que “pese al incremento del dólar y la suba en el honorario de los profesionales que hacen los controles del mantenimiento de los elevadores, las subas se amortiguaron en un valor menor al de la inflación y el alza de la moneda extranjera. Hay subas, pero no en los niveles que se manejan en otros rubros, son inferiores en nuestro caso, respondiendo a una grilla de índices del que ninguna empresa de mantenimiento de ascensores puede esquivar”.
En junio pasado hubo un aumento de entre el 12 y el 20 por ciento. La diferencia, como ocurre en cada suba de expensa ordinaria, pasa por los servicios que tiene cada consorcio.
El piso que pagaron todos fue del 11,5 por ciento por el aumento que recibieron como suba de sueldo de ese mes los encargados de edificios. Los que abonaron más fueron los que tienen medidores de gas y cuentan con servicios especiales en este rubro, como por ejemplo la calefacción central.
En tanto, un tema que trae polémica es la diferencia entre las expensas ordinarias y las extraordinarias.
La morosidad en el pago de expensas ordinarias sigue alta y ronda en un 35 por ciento
“El mantenimiento, conservación y reparación de las cosas y partes comunes o bienes del consorcio, y aun la sustitución o reemplazo de los existentes, constituyen gastos definidos como expensas comunes ordinarias”, según informa la Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal, en su página oficial.
Aclaran en esa institución que “las expensas comunes extraordinarias, en cambio, constituyen un supuesto de absoluta excepción, pues comprenden aquellos gastos decididos por los copropietarios en asamblea con miras al embellecimiento o mejor funcionalidad de los bienes comunes (remodelación del hall de entrada, equipamiento del salón de usos múltiples”.
SE MANTIENE ALTA LA MORA
En ese esquema de suba del valor de las expensas ordinarias y extraordinarias, la morosidad no baja del piso del 35 por ciento y enciende luz de alerta entre los administradores porque en distintos casos puede terminar en la justicia.
Estas situaciones generaron una ola de intimaciones a los propietarios e inquilinos que no cumplieron con la obligación mensual.
El atraso en el pago de la expensa abre serios problemas en los consorcios porque se generan confrontaciones entre vecinos ya que la mora siempre produce la merma de recursos para encarar reparaciones de espacios comunes.
Con las subas que se vienen, el índice de morosidad puede tener un aumento, y es otro ítem a tomar en cuenta para los próximos meses.
Según plantearon en el semestre pasado en la Asociación Civil de Administradores Independientes de Propiedad Horizontal “no sube la cantidad de gente que no paga, se trata de vecinos que se atrasan en el pago. Uno de cada tres no cumple con el primer vencimiento. Las demoras generan gastos, es un perjuicio porque se terminan pagando intereses”.
En el mismo sentido, la Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal aseguran que “se está pagando de forma mas lenta”. Y remarcan que hace más de “un año y medio, quienes no pagaban eran por situaciones de sucesión, herencias y otros temas afines a estos rubros”, pero con el correr del tiempo “la situación se agravó”.
