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La Plata, peor que Ciudad Gótica: un par de motochorros asaltó a Batman Solidario

“Ya ni los superhéroes nos salvamos de esto”, fue la primera frase que soltó Batman Solidario al relatar el episodio de inseguridad del que fue víctima ayer por la mañana, a metros del hospital Sor María Ludovica. Se trató de un ataque de motochorros de los tantos que ocurren a diario en todos los rincones de la Ciudad. Declarado Vecino Destacado de La Plata por la labor que realiza desde 2013, se encargó de aclarar en diálogo con este medio: “Yo soy un ciudadano más, pero es la primera vez que pasa”. Y es que en La Plata la inseguridad se transformó en una epidemia para la cual, hasta el momento, no hay vacuna a la vista.

Los asaltos de delincuentes motorizados en dos ruedas se extienden por toda la Región, aunque hay barrios que se convirtieron en su coto de caza predilecto. Villa Elvira, Los Hornos, El Mondongo, el corredor que va desde el parque Saavedra hasta las avenidas 72 y 31, por mencionar solo algunos, son parte de este paisaje cada vez más inestable. Basta repasar los casos que tuvieron lugar en el último mes (en 29 y 59; en 11 y 502; en 65 y 142; en 4 y 80 bis), sobre todo aquellos en los que la violencia fue la herramienta saliente.

“TE MATO, TE PEGO UN TIRO”

El primer descargo de este hombre que tiene una conexión especial con los chicos que están internados o que pasan por el hospital de Niños, se dio en las redes sociales (ver recuadro).

Allí, donde muchas personas que lo admiran y siguen sus andanzas lo leen, contó con sentimiento las vicisitudes del atraco y lo que éste causó en su persona. “Querida gente de bien, no recuerdo sinceramente si alguna vez les he escrito como Bruno Díaz y no como Batman, pero en este caso lo haré”, reflejó en su muro. Su elección se debió a que el hecho le ocurrió como “civil”, y no con el traje del personaje.

Según le contó a este diario, primero pensó que podía tratarse de una broma en la calle

En su conversación con EL DIA, señaló que “hace unos días habíamos donado dos computadores con la intención de que queden en el Hospital, para que los chicos puedan seguir las clases de forma virtual. Había quedado con la hermana Nilda para ver la forma de administrar eso y estuvimos reunidos desde las 10 hasta las 11”. Cuando el encuentro concluyó, salió del sanatorio situado en la manzana que va de 14 a 15 y de 65 a 66, y caminó por 65 en dirección a 19, donde tenía estacionado su vehículo particular.

“En ese momento”, indicó, “yo venía escuchando un mensaje de audio en el teléfono y al llegar a calle 17 -me faltaba media cuadra para llegar a la camioneta-, sentí que me gritaban”. Al girar, observó a un chico que se le acercaba con las manos en los bolsillos, como si estuviera por sacar algo de entre sus ropas. “Dame el celular, dame el celular o te mato, te pego un tiro”, bramó el ladrón.

La situación tomó a Bruno Díaz por sorpresa y lo dejó sin reacción. “Primero pensé que era una broma”, reveló, pero al ver que otro joven se acercaba en una “motito toda destartalada”, entendió que la cosa iba en serio. El cómplice del primer delincuente que se le acercó comenzó a “apurarlo”. El damnificado llevaba “un camperón muy lindo, que amaba, y también me lo pidió. Fue todo tan rápido que ni miedo pude sentir… ni siquiera atiné a sacar la llave de la camioneta que tenía en la campera”, contó.

Los motochorros ya habían cumplido su papel y se retiraron de la escena con las pertenencias de Batman. Él, por su parte, se quedó “sin saber qué hacer, parado en la esquina. Es la primera vez en la vida que me pasa una cosa así”, lamentó. Mientras los veía huir, pensó en que “tenían la edad de mi hijo. Me llamó la atención que eran pibitos, muy jovencitos, de 15 o 16 años”. Asimismo, precisó que “iban en una motito toda destartalada”.

Por último, el “superhéroe” platense detalló que los ladrones “no me mostraron nunca un arma, los dos tenían las manos en los bolsillos. Pero uno nunca sabe.” Y culminó: “Te queda decir ‘gracias a Dios que no me pasó nada’”.