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Noche de los Lápices: estudiantes y organizaciones se movilizan en el centro de La Plata

Con una marcha por el centro de La Plata se recordó hoy a los diez estudiantes secundarios que fueron secuestrados y torturados por reclamar el boleto estudiantil, en una operación de terrorismo de Estado conocida como “La Noche de los Lápices”, de la cual se cumplirán 46 años.

Seis jóvenes de ese grupo continúan desaparecidos, y la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), la organización que integraba a varios de ellos convocó a una caravana que partirá hoy a las 14 desde la Plaza Italia (7 y 44) y culminará en el Ministerio de Infraestructura bonaerense, en 7 y 58.

La noche del 16 de septiembre de 1976 se inició con un operativo conjunto de efectivos policiales y del Batallón 601 de Ejército para capturar a 10 jóvenes que tenían entre 16 y 18 años, y en su mayoría eran integrantes de la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), quienes reclamaban por el boleto estudiantil secundario gratis.

Los jóvenes habían marchado en reclamo del boleto estudiantil, un beneficio suspendido tras el golpe militar. Por eso, al episodio se lo denominó “La noche de los lápices”.

KICILLOF MARCHÓ EN CALLE 8

Todos fueron conducidos al centro clandestino de detención “Arana”, donde se los torturó durante semanas, y luego se los trasladó al Pozo de Banfield.

De esos estudiantes continúan desaparecidos: Claudia Falcone, Francisco López Muntaner, María Clara Ciocchini, Horacio Ungaro, Daniel Racero y Claudio de Acha. Mientras que Gustavo Calotti, Emilce Moler, Patricia Miranda y Pablo Díaz también fueron secuestrados y son los únicos sobrevivientes del hecho.

En conmemoración a ese día, a partir del 2014, mediante la Ley 27.002, cada 16 de septiembre se celebra el Día Nacional de la Juventud.

“A 46 años de la Noche de los lápices decimos: Los sueños no se proscriben, con Partido Judicial no hay democracia”, sostuvieron este año los organizadores de la convocatoria para hoy a las 14.

Días atrás, la comunidad de la Escuela 12 de Gonnet, junto a familiares de Horacio Ungaro, reclamaron que se restituya a ese colegio el nombre del adolescente que había sido elegido por unanimidad, en el 2006, en homenaje a su lucha estudiantil. La escuela, de 495 entre Centenario y 15 bis y en el 2006, por decisión de la comunidad se decidió que llevara el nombre de Horacio Ángel Ungaro, lo que en ese momento fue avalado por resolución de la Dirección General de Educación y Cultura bonaerense.

Cabe indicar que la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación organiza para hoy la jornada ¡Siempre Presentes!, en homenaje a las y los jóvenes de “La Noche de los Lápices”, un hecho de terrorismo de Estado perpetrado el 16 de septiembre de 1976.

Se tratará de una actividad que formará parte de la Campaña “Participar es tu derecho”, una iniciativa de la Subsecretaría que busca promover el derecho a la participación y a la organización que tienen los y las estudiantes secundarios, y se realizará de 10.30 a 16 en el Auditorio Cultura de Tecnópolis.

Marta Ungaro, hermana de Horacio, uno de los estudiantes secuestrados y asesinados, afirmó que “cada 16 de septiembre”, en las marchas y actos que se realizan para conmemorar ese crimen del terrorismo de Estado “los chicos salen del pozo donde los mataron y viven en cada joven que lucha por construir un país mejor”.

EN TECNÓPOLIS

Estudiantes secundarios bonaerenses participaron hoy con funcionarios y dirigentes de una charla, organizada por la Secretaría de Derechos Humanos, en conmemoración de la denominada «Noche de los Lápices», en el predio de Tecnópolis, donde se destacó el «rol de la juventud, militancia y el compromiso político», de un grupo de jóvenes platenses que hace 46 años fueron víctimas de un crimen de terrorismo de Estado.

«Eran pibes y pibas como ustedes que tenían una militancia, un compromiso político y eso es fundamental, la posibilidad de tener ideas, de poder ayudar a otros y transformar las injusticias», reflexionó el secretario ejecutivo del Consejo Federal de Derechos Humanos e integrante de la agrupación Hijos, Agustín Di Toffino, en el inicio de su disertación.

En este sentido, el funcionario señaló que aquellos estudiantes de La Plata «marcaron el camino de la no resignación» y la importancia de «poder pensar colectivamente por un mundo mejor».

«Tenemos la fuerza para salir adelante, sin perder de vista que tenemos que tener memoria como garantía de no repetición y estar movilizados», exhortó Di Toffino a los cientos de jóvenes presentes en el auditorio.

Luego tomó la palabra la legisladora porteña Ofelia Fernández, quien describió esta fecha como parte de «su ADN militante» y reconoció el «gran potencial» de aquella generación» que estaba lista para «construir otra Argentina y tenía con qué».

«A esos pibes les robaron su futuro. Nosotros tenemos nuestro futuro enfrente», expresó la legisladora y haciendo alusión a las «luchas presentes» que deben dar las nuevas generaciones agregó que «la realidad va a ser más difícil mañana si nuestra generación no interviene a tiempo».

«Todos los derechos de hoy son las luchas de ayer, nosotros tenemos hoy la obligación de luchar por los derechos de mañana», concluyó Fernández luego de una exposición en la que animó a los estudiantes a «transformar las escuelas y la educación».

En tanto, la integrante de la asociación Madres de Plaza de Mayo Vera Vigevani de Jarach rememoró la expresión de aquellos jóvenes «el futuro es nuestro» y sostuvo que «el futuro era de ellos, lo sigue siendo y será de ustedes».

«Dense el brazo entre ustedes. Es lo que hicimos las Madres. La fuerza se consigue, sobre todo con la unión porque la unión hace la fuerza. El darse la mano permite alcanzar metas compartidas», aconsejó Jarach desde su silla de ruedas ubicada bajo el escenario.

Asimismo, aseguró que prefirió hablar desde esa posición porque quería «estar a la misma altura de los chicos» que asistieron a este encuentro.

A su turno, en representación de las Abuelas de Plaza de Mayo, Buscarita Roa, expresó que «el ser militante no es ningún pecado» y señaló que era una forma de «pensar en los demás y no sólo en uno mismo», y exhortó a los estudiantes a «estar presentes tratando de colaborar con lo que puedan cada uno desde su lugar».

«Nunca hay que dejar de pelear por lo que uno cree ni tener miedo, nosotras no lo tuvimos, fuimos a la plaza, seguimos buscando y seguiremos adelante en esta lucha», remarcó.

Por la mañana, como parte de esta recordación se desarrollaron dos talleres sobre Derechos Humanos en el predio ubicado en Villa Martelli.

El primero implicó el armado colectivo de un mural y carteles con consignas sobre las luchas por los derechos humanos y el segundo incluyó una muestra fotográfica con imágenes sobre la vida cotidiana en dictadura, el cual contó con la presencia de la artista Natalia Calabrese.