Ahora sí, de acá en adelante, todos los partidos serán a todo o nada, entendiéndose por esto que ganar representará seguir avanzando en dirección a la final, y perder el adiós. Y esta modalidad tendrá como protagonistas iniciales a los seleccionados de Argentina y Francia, que hoy a las 11, se cruzarán en la ciudad de Kazán, capital del estado de Tartaristán, para establecer quien avanzará a cuartos de final en la Copa del Mundo Rusia 2018.
Todos coinciden en que a partir de ahora, en octavos de final, tras la depuración que representa la etapa clasificatoria de Grupos, es cuando verdaderamente empieza el Mundial, y también hay acuerdo en considerar que este cruce de argentinos y franceses es poco menos que una final adelantada, la que nadie imaginó antes de empezar la competencia, porque la lógica que en este Mundial casi que no entró a la cancha indicaba se estaba ante dos ganadores de Grupo.
En la Plaza Moreno de La Plata se podrá ver el partido en una gran pantalla gigante
En estos términos, Francia avanzó por el camino esperado en el Grupo C, con triunfos sobre Australia y Perú, más un empate con equipo de reserva frente a Dinamarca; mientras que Argentina trastabilló con un inesperado empate de entrada con Islandia, se derrumbó goleado por Croacia en la segunda presentación por el Grupo D y recuperó protagonismo, de última, con un triunfo sobre Nigeria.
Más allá de los antecedentes inmediatos, que ubican al representativo europeo un escalón por arriba del nuestro, el cruce de hoy marca un volver a empezar todo desde cero, y dentro de ese panorama, atención, porque la recuperación anímica exhibida por la Argentina el martes pasado, al zafar de la eliminación, puede llegar a acortar esa distancia teórica.
El partido será a todo o nada, y eso adelanta que si los 90 minutos reglamentarios finalizan sin que haya un ganador, será necesario jugar un tiempo suplementario de 30 minutos, que de no ser suficientes le darán paso a un desempate a través de remates que serán ejecutados desde el punto penal.
En lo que tiene que ver con el equipo argentino, el agónico 2-1 ante Nigeria, con increíble gol de Marcos Rojo, propició un verdadero renacer anímico, que tras las diferencias que explotaron en la concentración de Bronnitsy, con un inocultable mal ambiente, instaló un cuadro de situación más favorable, que ahora deberá extenderse al plano futbolístico.
La enorme alegría del martes, que desembocó en el pasaje a octavos de final, hizo revivir al equipo argentino, que de ahí en adelante ha dejado ver una imagen más ligada al momento. Más allá de los rumores que siguen en pie dando cuenta de algo así como una “mesa chica” del plantel con la cual el entrenador ha tenido que consensuar antes de adoptar las más importantes decisiones de fondo.
Para el partido de esta tarde Jorge Sampaoli tiene decidido el ingreso de Cristian Pavón, el delantero de Boca, en reemplazo de Gonzalo Higuaín. Así, Lionel Messi quedará como único delantero en un esquema que prioriza más la lucha en el medio que el ataque. Pavón se recostará más a la banda derecha.
Por lo que trascendió desde la concentración de Francia, en la localidad de Istra, a 85 kilómetros de Moscú, Didier Deschamps, como entrenador, reconoce una extrema preocupación en Lionel Messi, quien asomó el martes, con un gol, un tiro libre en un palo, y gambetas que lo mostraron más animado que en las actuaciones anteriores, al punto que programa una “defensa compacta” para evitar que los delanteros argentinos tengan espacios.
El nivel exhibido en lo que va de la competencia, a excepción de buena parte del primer tiempo contra Nigeria, aparece como lo más preocupante de una formación argentina que para colmo de males no ha tenido una buena convivencia y para definiciones como las de hoy, su alto promedio de edad parece jugarle en contra.
“Argentina necesita el balón pero está en gran peligro cuando lo pierde”, Revista France Football
Pero de todas formas, el fuerte rival que tendrá hoy delante, quien llegó a Rusia con el cartel de “candidato”, también mostró debilidades futbolísticas por las cuales se le podría entrar. Se trata de un equipo elástico desde lo táctico, es cierto; los encargados de elaborar juego tienen dinámica, y transiciones ordenadas; más que tener la pelota, prefiere el juego de contra; aunque la presión lo incomoda, en particular cuando se arma en la franja central; y le cuesta resolver cuestiones en la última línea, por los costados y cuando el referente le escapa a los centrales.
No tiene buenas coberturas Francia en los últimos metros, y ahí es donde puede aprovechar Argentina para quedarse con todo.
EN FRANCIA SON OPTIMISTAS
“Por qué Argentina es el mejor oponente posible para el equipo francés”. El título de la nota que publicó la prestigiosa revista France Football no anda con rodeos: la selección de Sampaoli aparece como el rival más apetecible para los comandados por Deschamps. Uno de los primeros puntos sobre los que hace hincapié el medio en su análisis está enfocado en que será un partido “muy abierto”. Advierten que los duelos contra Australia, Perú y Dinamarca en la fase de grupos se desarrollaron ante rivales que plantaron un férreo bloque defensivo. “Tenga la seguridad, a priori, de que el escenario será diferente el sábado”, afirmaron.
