Inicio Argentina Polémica e incertidumbre por la función que cumplirán los 300 gendarmes que...

Polémica e incertidumbre por la función que cumplirán los 300 gendarmes que llegarían a La Plata

En medio del crecimiento de la polémica entre Nación y Provincia, se confirmó a La Plata como una de las bases operativas para a los gendarmes que destine el gobierno de Alberto Fernández. El lugar de asentamiento de estas fuerzas -que aún se sigue analizando- se construirá con módulos similares a contenedores, con capacidad para albergar a unos 150 efectivos por turno. Con lo que, teniendo en cuenta las rotaciones, serían no menos de 300 los agentes federales destinados a reforzar la seguridad en la Ciudad, según pudo saber este diario.

En ese marco, se abrió la polémica y el debate por la función que cumplirá esta fuerzas que, de acuerdo a fuentes oficiales, trabajará con la modalidad de “unidades móviles”. En tanto que contará con el apoyo de Prefectura (actualmente apostada en las costas de Berisso y Ensenada), Policía Federal y Policía de Seguridad Aeroportuaria. Además, se informó que las tareas serán coordinadas en reuniones con la Policía Bonaerense y el Municipio.

Mapa de la inseguridad

Se explicó que de esos encuentros saldrá el llamado “mapa del calor”, en donde se definirán las zonas más calientes en materia de delito. Las “cálidas”, pintadas de rojo, serán aquellas en las que existe un alto índice de delincuencia, en contraposición con las “más frías”, identificadas con tonos celestes.

“Los gendarmes van a actuar en conjunto con las fuerzas policiales en las denominadas zonas rojas”, que, según explicaron las fuentes consultadas, en La Plata serían las de El Mercadito, La Favela, Melchor Romero, El Mondongo y el área que comprende a la megatoma de Los Hornos, entre otras. Advirtieron que los gendarmes estarán armados para “darle pelea” a los narcos en los barrios en los que el flagelo está más arraigado.

Además, se prevé la instalación de retenes y controles vehiculares, que irán cambiando de lugar. “La idea es cambiar el concepto. No dejar puestos de control fijos porque sino los delincuentes saben donde estás y te esquivan. Por eso las llamamos unidades móviles”, se indicó.

Según se pudo saber, la resolución creando el comando integrado por las cuatro fuerzas federales se firmaría esta misma semana para ponerlo en funcionamiento el mes que viene. Algo que no sucederá hasta no construir la base operativa a la que todavía se le busca sitio y de la que solo se sabe que estará “en un lugar estratégico de La Plata”.

Réplica del Gobernador

Mientras el envío de gendarmes también a distritos del Conurbano (sin precisión aún sobre el número total) sumó más polémica. Es que el gobernador, Axel Kicillof, redobló ayer sus reclamos al gobierno nacional para coordinar el operativo del que, según admitió, se enteró por los diarios. Incluso, advirtió que desde la llegada de Alberto Fernández al poder, hace más de tres años, “requerimos el envío de seis mil gendarmes. Se habló, hubo conversaciones, muchas incluso con el Presidente por el envío de gendarmes y todavía no mandaron ninguno de esos seis mil”, dijo en tono de queja.

Las palabras del Gobernador fueron amplificadas durante una entrevista radial y llegaron luego de la carta que la semana pasada envió al ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, que mantiene el diálogo roto con su par provincial, Sergio Berni. En la misiva, el mandatario bonaerense pidió explicaciones sobre los efectivos que, de acuerdo a lo poco que ha trascendido hasta el momento, desembarcarán en zonas calientes del Conurbano: La Matanza, Pilar, Tigre, Avellaneda y también en La Plata, donde además se instalarán bases operativas. La idea es que desde allí se movilicen a distintos puntos del Gran Buenos Aires.

Pero hasta ayer tanto en las intendencias del Conurbano como en la Ciudad e incluso en la Provincia reinaban el misterio y la falta de información. Así lo hizo saber el propio Kicillof, quien afirmó desconocer qué funciones cumplirán los efectivos: “Si los gendarmes tienen que ver con cuestiones del narcotráfico, la verdad que la Nación tiene la atribución vinculada al narcotráfico, no tiene que coordinar con nosotros estas operaciones vinculadas al narcotráfico o a perseguir al narcotráfico; envía los gendarmes y actúa, porque es una responsabilidad del gobierno nacional por ley”, pero que “si la idea es que haya un despliegue de gendarmes para cuestiones de seguridad ciudadana, evidentemente hay que coordinarlo con el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, porque si llaman al 911 que es provincial, ¿cómo se le avisa a Gendarmería? ¿qué va a haber? ¿un Gendarme en una esquina y ahí nos vamos a enterar?”.

Más allá de estos cuestionamientos, Kicillof dijo “no” estar para la polémica, sino “para los resultados” y abundó: “Estamos pidiendo un despliegue y una coordinación. Lo que le requerí (a Aníbal Fernández) es que me diga cuándo, dónde y cómo van a desplegar los gendarmes”.

Kicillof aclaró que no quiso “enfrascarse” en ninguna polémica que, dijo, le parece “inútil”, pero no disimuló su malestar por la falta de resultados. Algo por lo que, según aseguró, hace “tres años y pico (los que transcurrieron desde el arribo del Frente de Todos a la Casa Rosada) estamos pujando y nunca conseguimos”.

Y aunque buscó bajarle el tono a los cruces públicos con el ministro Aníbal Fernández, reiteró: “Nosotros venimos solicitando el envío de gendarmes desde que estaba la ministra anterior (Sabina Frederic); siempre requerimos el envío de 6 mil gendarmes a la Provincia. Hubo muchas conversaciones, incluso con el Presidente por este tema, todavía no mandaron ninguno y seguimos dando vueltas con este tema”, cuestionó Kicillof.

Lejos de ser solo un tema de gestión sobre la lucha contra la inseguridad y los narcos, las rispideces avivaron además la interna política que hace tiempo sacude a la coalición gobernante.

En ese sentido, el Gobernador aprovechó para contrastar la actual gestión nacional con la de Cristina Kirchner y, de paso, respaldar al cuestionado Berni: “Nosotros siempre solicitamos gendarmes y lo seguimos haciendo, sobre todo en vistas de aquel Operativo Centinela, con seis mil gendarmes en la época que Cristina era presidenta y Sergio Berni viceministro de Seguridad de la Nación”, recordó el mandatario provincial.

El enojo de Kicillof apuntó también a la forma en la que se anotició del operativo nacional: “Yo me entero por los diarios -reveló-. No quiere decir que no hubiera conversaciones, simplemente que si efectivamente tienen un plan, un diseño para temas de narcotráfico no requiere coordinación porque son cuestiones federales. Pero si es para seguridad ciudadana, indudablemente, tenemos que coordinarlo con las fuerzas provinciales”, insistió.

en los municipios involucrados

Al igual que en la Provincia, la incertidumbre era honda en los municipios en los que harán base los gendarmes. Como en La Plata, desde donde advirtieron que “no hay nada aún. Cero confirmación”, luego de que el lunes el intendente Julio Garro, a través de Twitter, destacara como una “buena medida” el envío de fuerzas federales para atender el flagelo de la inseguridad. Pero pidió dejar de lado las disputas políticas y que se convoque a los intendentes “a una mesa de diálogo y de trabajo, para articular esfuerzos y dar batalla a la avanzada del delito y el narcotráfico en la Provincia”.

La inquietud fue compartida por los intendentes opositores Diego Valenzuela (Tres de Febrero) y Néstor Grindetti (Lanús). “Es una medida necesaria en el contexto de inseguridad que estamos viviendo. Pero nos parece imprescindible que estén bien coordinadas Nación y Provincia y que los municipios seamos parte de esa conversación”, planteó por caso Valenzuela.