Boca logró lo que tanto deseaba en su paso por el Bosque. Sin sobrarle juego, derrotó a Gimnasia por 2 a 1 y llegará la última fecha del campeonato como gran favorito para ser campeón. Gimnasia luchó, corrió y empujó con mucha vergüenza, pero le faltó precisión en los últimos metros para torcer la historia.
Frank Fabra abrió el marcador en el primer tiempo, mientras que Leonardo Morales -de cabeza- había puesto la paridad parcial en el complemento, pero minutos después con un Lobo lanzado al ataque y diezmado en el fondo, Langoni se encargó de marcar cifras definitivas luego de una serie de rebotes sobre el arco de Rodrigo Rey, que mucho no pudo hacer.
En líneas generales Gimnasia fue de menor a mayor, y con el empate transitorio sintió que lo podía ganar. En el golpe por golpe, finalmente fue el Xeneize, ya con Sebastián Villa en cancha, quien encontró el segundo tanto y y apagó todo tipo de ilusión en el mens sana. Brahian Alemán, que jugó infiltrado por estar desgarrado, fue sustituido luego por Franco Soldano, que pese a sus ganas, volvió a estar en falta con el arco rival.
El Lobo con este traspié cerró su participación en condición de local, siendo que la próxima y última fecha de la Liga Profesional jugará en Córdoba con Talleres, en un duelo clave para asegurar su participación en Copa Libertadores, dependiendo además lo que suceda con Huracán (que juega con Patronato) y Argentinos (recibe a Vélez), rivales directos que buscan un cupo directo a la fase de grupos.
Gimnasia y Boca empezaron a jugar los 41 minutos de la primera etapa con la intención de lograr supremacía en la mitad del campo y en ese contexto fue el Lobo, mediante una media vuelta forzada de Brahian Alemán que se fue cerca del palo izquierdo, el que estuvo cerca de anotar a los ocho minutos.
Un minuto más tarde salió por lesión Benedetto y Hugo Ibarra decidió que el pibe Gonzalo Morales, el Toro, fuera su reemplazante.
El sorpresivo ingreso de Insaurralde por Franco Soldano fue el tema más comentado en la previa por los socios de Gimnasia, ya que esto provocó un adelantamiento de Brahian Alemán, que no estaba su plenitud física.
El primer cuarto de hora se pasó mostrando a un Boca que no jugaba como para saltar a la punta del torneo y un Gimnasia ordenado en defensa al cual le costaba construir ataques jugando en bloque.
El gol que consiguió Fabra en el minuto 28 fue un impacto duro para el Lobo porque el visitante no estaba plasmando en el juego una apreciable superioridad. Desde un ángulo cerrado y pegándole con mucho efecto, el lateral colombiano encontró una floja respuesta de Rodrigo Rey que se tiró pero no consiguió desviar la trayectjoria. El balón ingresó muy cerca de la base del segundo palo.
Con el ingreso de Franco Soldano por un Alemán muy dolorido, Gimnasia afrontó el segundo tiempo (40 minutos) sabiendo que era una situación muy compleja poder dar vuelta el resultado con el que se fue al descanso.
A los siete minutos, cuando Cardozo ya era el de más claros movimientos en la zona del mediocampo, llegó Gimnasia con un centro desde la izquierda que Ramón Sosa cabeceó al centro del arco donde contuvo Agustín Rossi.
A los diez minutos, Ibarra apostó por la velocidad y la jerarquía de Villa para preocupar a un Gimnasia que quería acorralar a Boca en su área.
El gol de Gimnasia (muy buen tiro libre de Eric Ramírez en forma de centro y gran cabezazo de Leonardo Morales) instaló en el estadio el gran clima de partido decisivo. La gente se entusiasmó con la intensidad de los mens sana y Boca empezó a apostar fuerte por el desequilibrio del colombiano Villa.
Una enorme oportunidad tuvo el Lobo en el minuto 16, cuando Ramírez capturó una pelota en el borde del área y rápido pateó al arco, pero su remate se fue desviado.
La jerarquía de Sebastián Villa se hizo notar en cada una de sus intervenciones. Una gran corrida suya por la izquierda derivó en una doble atajada de Rey y Langoni capturó el rebote para marcar el segundo gol xeneize.
Gorosito cambió a Insaurralde por Steimbach acentuando el perfil ofensivo de un equipo que no quería perder en su casa. Contín por Benjamín Domínguez representó la última gran apuesta tripera para intentar llegar a un nuevo empate.
Gimnasia, con más voluntad que claridad, se fue dando cuenta de que le quedaban pocas fuerzas para ir en busca de su objetivo.
Así llegó el pitazo final y Boca se quedó con tres puntos y acumula 51 unidades. Si el fin de semana vence a Independiente, se consagrará campeón del fútbol argentino. Con otro resultado, quedará pendiente de lo que ocurra entre Racing y River en Avellaneda.
Fotos // Dolores Ripoll EL DIA
FORMACIONES
GIMNASIA: 17- Rodrigo Rey; 6- Guillermo Enrique, 4- Leonardo Morales, 3- Oscar Piris, 32- Matías Melluso; 44- Benjamín Domínguez, 30- Agustín Cardozo, 27- Manuel Insaurralde, 11- Ramón Sosa; 10- Brahian Alemán; y 43- Eric Ramírez. DT: Néstor Gorosito
Los suplentes del Lobo: 1- Tomás Durso, 2- Guillermo Fratta, 41- Gonzalo González, 18- Nicolás Colazo, 33- Nery Leyes, 5- Emanuel Cecchini, 27- Manuel Insaurralde, 38- Alexis Steimbach, 20- Alan Lescano, 9- Nicolás Contín, 15- Franco Soldano y 26- Alexis Domínguez.
BOCA: 1– Agustín Rossi; 17- Luis Advíncula, 5- Carlos Zambrano, 4- Nicolás Figal, 18- Frank Fabra; 33- Alan Varela, 8- Guillermo Fernández, 20- Juan Ramírez, 10- Óscar Romero; 41- Luca Langoni y 9- Darío Benedetto. DT: Hugo Ibarra
Los suplentes del Xeneize: 13- Javier García, 2- Facundo Roncaglia,, 57- Marcelo Weigandt, 3- Agustín Sandez, 14- Esteban Rolón, 36- Cristian Medina, 23- Diego González, 11- Martín Payero, 16- Aaron Molinas, 22- Sebastián Villa, 29- Norberto Briasco y 28- Gonzalo Morales.
Arbitro: Hernán Mastrángelo.
Cancha. Gimnasia y Esgrima La Plata.
Hora de inicio: 15.
TV: TNT Sports.
