BARCELONA, 25 Ene. (EUROPA PRESS) –
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha defendido en el pleno de este viernes su gestión al frente del Ayuntamiento de Barcelona en la presentación del informe sobre el estado de la ciudad 2018, donde ha asegurado que Barcelona funciona, mientras que la oposición le ha reprochado su falta de diálogo, el incumplimiento de compromisos en el ámbito de la vivienda y el «electoralismo» que ha marcado alguna de sus medidas.
Desde la oposición, ediles han afeado a Colau el contraste que hay entre este pleno del estado de la ciudad y el primero de su mandato: se celebró en el Saló de Cent –más grande que el de plenos– e invitando a entidades y vecinos para abrirlo a la ciudadanía, mientras que este se ha convocado el mismo día que otro pleno extraordinario y el ordinario de enero.
En su primera intervención, la primera edil ha asegurado que la ciudad atravesó en 2018 una situación «excepcional» por la situación política en Catalunya, aunque ha celebrado la reducción de la tasa de paro hasta el 9%; que Barcelona se haya convertido en la capital europea en movilidad; la aprobación de la reserva del 30% para vivienda protegida; la propuesta del dentista municipal, y la creación del operador metropolitano Barcelona Energía.
Asimismo, Colau ha puesto en valor acuerdos «históricos» que se han producido este mandato como la regularización de las obras de la Sagrada Familia; el acuerdo para desencallar el Espai Barça; la reforma de la Model; la llegada del Metro a los barrios de la Marina; y el Plan de Barrios, que ha destinado cerca de 150 millones a actuaciones vinculadas a la educación, los derechos sociales, la actividad económica y el medio urbano, entre otros.
La alcaldesa también ha instado a los grupos municipales con presencia en el otras administraciones a «desbloquear» los presupuestos municipales, catalanes y centrales; ha pedido a la Generalitat más agentes de los Mossos en la ciudad y más inversión en vivienda y guardería, y también ha instado al Gobierno central de Pedro Sánchez a regular los precios del alquiler de forma urgente.
MENOSPRECIO A LA OPOSICIÓN
El presidente del PDeCAT en el Ayuntamiento, Xavier Trias, ha asegurado que Colau trata con menosprecio a la oposición: «Le pido que corrija las formas, la manera de actuar y el trato», y ha criticado a la alcaldesa por aprobar medidas que luego, ha dicho, no se podrán cumplir por motivos económicos.
Desde Cs, Carina Mejías, ha recordado que Colau no haya aprobado ningún Presupuesto por acuerdo del pleno y ha dicho que la seguridad es un problema por su aversión a la autoridad y por un ajuste de cuentas por deudas pasadas con la Guardia Urbana: «El balance de su gestión tiene bastantes borrones y errores. Debería plantearse si puede volverse a presentar a unas elecciones».
Montserrat Benedí (ERC) ha reprochado a Colau que no haya llevado a cabo el programa de regeneración con el que se presentó: «Barcelona necesita pasar de la teoría a la práctica, de la proclama a los hechos, y ustedes solo se quedan en informes que luego no se corresponden a la realidad», así como le ha asegurado que las medidas importantes para la ciudad, como la conexión del tranvía, han sido posibles gracias a ERC.
LEGADO DE INCUMPLIMIENTOS
Jaume Collboni (PSC) ha dicho que Colau ha promovido medidas que nadie pide a un alcalde –como un dentista municipal y una energética– pero culpa a otras administraciones de lo que sí le corresponde, y cree que irá a las elecciones con un legado de incumplimientos, como en vivienda, y después de haber protagonizado la historia de una decepción, haber subordinado Barcelona al independentismo y haber demostrado que «la nueva política ha sido hacer frases».
Collboni ha dicho que Podemos ha sacrificado la regulación del alquiler para que Colau pudiera hacer su discurso, sobre las «costillas» de miles de ciudadanos que iban a firmar contratos de alquiler, según él.
La alcaldesa le ha respondido que los únicos que ponen sus costillas son los vecinos y las entidades que luchan contra los desahucios: «Ellos también querían votar en contra de su decreto, que es una estafa y está al servicio de los sectores más especulativos».
DEBATE PREELECTORAL
El presidente del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha asegurado que Colau antepone la ideología a la convivencia, sobretodo en movilidad: «Hoy aprobaremos un proyecto de tranvía que es una gesticulación más a la puerta de unas elecciones municipales», y ha criticado que apoye a los okupas, y que tenga, ha dicho, alergia a la policía y a la ley, en sus palabras.
Eulàlia Reguant (CUP) ha criticado que este pleno sobre el estado de la ciudad «se ha convertido en un debate preelectoral» y ha defendido que, para abordar la situación de la ciudad, hay que hablar de sus barrios, porque se mantienen las desigualdades entre ellos, por lo que ha exigido que se ponga el foco en el acceso a los servicios sociales y a la vivienda y escuchar a los vecinos.
El concejal no adscrito Gerard Ardanuy ha pedido a Colau que sea valiente y que destine los recursos necesarios para impulsar una mejor movilidad, educación y más espacios verdes, mientras que el también no adscrito Joan Josep Puigcorbé ha reclamado a BComú que se esfuerce más «para reducir las desigualdades y conseguir un modelo de ciudad socialmente avanzado de convivencia».
