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La segunda noche de disturbios por Hasel en Catalunya deja 33 detenidos y 12 heridos

Mossos atribuye los disturbios a múltiples factores, entre ellos el hartazgo por el contexto de pandemia

BARCELONA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) –

La segunda noche de disturbios en Catalunya en las manifestaciones contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel ha dejado un balance de 33 detenidos, 12 heridos, ocho de ellos mossos d’Esquadra, numerosos destrozos y comercios y establecimientos saqueados.

Según el balance realizado este jueves en rueda de prensa por el director general de los Mossos, Pere Ferrer, y el comisario Joan Carles Molinero, se quemaron en total 135 contenedores y nueve vehículos en Barcelona, Lleida y Girona.

Ferrer ha lamentado que se produjeran incidentes de carácter violento en las manifestaciones y ha pedido que no se confunda el legítimo derecho de protesta con el uso a la violencia: «Es un paso que no podemos tolerar y que trabajamos para combatirlo».

En concreto, en los incidentes en la manifestación de Barcelona, que arrancó a las 19 horas en Jardinets de Gràcia, con unas 2.000 personas, hubo 12 detenciones principalmente por desórdenes, atentado, robo con fuerza y daños.

Según ha detallado el comisario Molinero, varios grupos de encapuchados generaron disturbios durante la manifestación, cruzando contenedores y quemándolos, y alzando barricadas primero en la plaza Urquinaona y después extendiéndolas a varias calles del centro de la ciudad.

Durante la noche se quemaron 84 contenedores en la ciudad, ocho motos, se destrozaron 11 comercios, un grupo hizo una intrusión en el Hotel Mandarin, donde se rompieron las cámaras de seguridad, y en un concesionario de Rambla Catalunya.

En la ciudad hubo diez heridos (cuatro de ellos mossos) y también hubo un intento de entrar en el edificio de la Bolsa de Barcelona, en el paseo de Gràcia, que pudo ser evitado por efectivos antidisturbios.

Lleida tuvo como epicentro de la protesta el centro penitenciario de Ponent, donde está encarcelado Hasel, que congregó a 600 personas, con grupos que al final protagonizaron incidentes como quema de 40 contenedores, destrozos de mobiliario urbano, comercios dañados y un vehículo quemado, con el resultado de 14 detenidos y un mosso herido.

En Girona, la manifestación concentró a 600 personas y derivó en incidentes en el casco antiguo, con un balance de 11 contenedores quemados, un mosso herido y cinco detenidos, y en Tarragona hubo dos detenidos en un intento de corte de la vía A-7.

PREOCUPACIÓN

El director de Mossos ha mostrado su preocupación ante las manifestaciones violentas y ha expresado que «no es un fenómeno único en Catalunya», que se ha extendido a otras ciudades del resto de España.

Ha valorado que esta violencia en las protestas puede ser fruto de muchas variables, entre ellas el hartazgo por la pandemia de coronavirus y la fatiga por el contexto, y que tienen el origen en «la chispa» que puede acabar generando un incidente mayor.

«Lo que hemos visto en estas últimas horas no es normal», ha valorado, y ha dicho que cree que es fruto de muchas variables y que les preocupa que pueda tener repercusiones generando más incidentes.

PERFIL

Molinero ha detallado que el perfil de los vándalos es variado, con edades diferentes, algunos organizados y otros no, que se infiltran en las protestas con el objetivo de causar disturbios.

En la manifestación ha diferenciado el grueso de gente que acude de forma pacífica de grupos reducidos de unas entre 50 y 250 personas de perfil violento que usan la multitud para camuflarse y después para poder generar incidentes.

Son encapuchados que principalmente se dedican a alzar barricadas, quemar contenedores y atacar a las líneas policiales, y les ha descrito como una amalgama de personas violentas y agresivas que aprovechan este entorno para crear altercados.