La recién liquidada Entidad Promotora de Salud Comfacor, que tenía en sus registros de afiliados a 534.593 usuarios, tuvo que ceder el derecho de atención a cuatro Eps similares que en adelante prestarán los servicios médicos en todo el país.
La decisión la tomó la Superintendencia Nacional de Salud, luego de anunciar la terminación total de la licencia de funcionamiento a Comfacor, tras descubrir serias irregularidades y actos de corrupción con dineros destinados a la atención de los pacientes.
En agosto del año pasado, la Contraloría General de la República reveló hallazgos fiscales por un total de $17.316 millones de pesos en la EPS Comfacor de Córdoba.
Según el informe de la Contraloría recursos que debían destinarse exclusivamente a la prestación de servicios de salud, se desviaron para contratar terceros privados para la administración de la EPS en otros departamentos de la Región Caribe, así como para pagar patrocinio, servicios de publicidad y, también, beneficios extralegales de nómina.
El relevo de afiliación correspondió a las Eps Mutual Ser, Nueva Eps, Coosalud y Cajacopi que deberán garantizar la prestación de todos los servicios, incluidos los de alta complejidad.
Comfacor tenía sus oficinas principales en Montería pero tenía un amplio radio de operación en la Región Caribe.
Del total de afiliados, 184.182, pasaron a Mutual Ser, es decir el 35,3 %, seguido por La Nueva EPS con el 25,5 %, que representa 133.124 usuarios; Coosalud, con el 19,7 %, es decir, 133.066; y Cajacopi con el 19,5 % (102.101). Los 12.119 afiliados restantes pertenecen a comunidades indígenas quienes por unanimidad seleccionaron a la EPS Mutual Ser, a donde quedarán trasladados a partir del primero de abril.
Los municipios de San Jacinto del Cauca en Bolívar y San José de Uré en Córdoba, donde no existía una EPS que pudiera recibir a los usuarios de Comfacor, fueron asignados a Mutual Ser, de acuerdo con el procedimiento establecido, que faculta a la Supersalud a seleccionar un operador, en caso de no existir oferta en el territorio.
El Superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel, explicó que este proceso lo adelanta la Eps liquidada teniendo en cuenta que los grupos familiares sin pacientes con patologías de alto costo se distribuyen, el 50% en partes iguales entre las EPS que operen en cada municipio y el 50 % restante en forma proporcional al número de afiliados de las EPS en cada departamento.
Los grupos familiares que tengan pacientes con patologías de alto costo, es decir, pacientes trasplantados, con VIH, renales, diagnosticados con hemofilia, entre otros, se clasificarán en forma independiente de los demás grupos familiares y se distribuirán aleatoriamente entre las EPS que operen en el municipio en forma proporcional a su número de afiliados.
De acuerdo con lo anterior, los pacientes de alto costo fueron distribuidos con sus grupos familiares, de la siguiente manera: Mutual Ser, 63.166 usuarios; La Nueva EPS, 36.063; Cajacopi, 24.650 y Coosalud, 23.474.
El encuentro contó con la presencia de representantes de la Procuraduría General de Nación, la Contraloría General de la República, la ADRES y las Superintendencias de Salud y de Subsidio Familiar, quienes actuaron como veedores del proceso.
Por su parte, los representantes de las cuatro EPS receptoras calificaron como transparente el proceso de asignación de afiliados que, a partir de mañana, comienza su etapa de verificación y a finales de esta semana ya los usuarios podrán consultar a través del portal Web de Comfacor www.comfacor.com.co, con su número de cédula, la EPS a la que fueron trasladados.
Así mismo, Comfacor deberá entregar a las EPS receptoras la carpeta original con los documentos soporte de afiliación de cada uno de los usuarios asignados y la base de datos de usuarios con fallo de tutela, comités técnico científicos aprobados, la información de los servicios autorizados que a la fecha de la asignación no hayan sido garantizados y las prestaciones económicas no liquidadas, todo esto con el fin de dar continuidad a los tratamientos y servicios de aquellos casos especiales.
GUDILFREDO AVENDAÑO MÉNDEZ
Para EL TIEMPO
Montería