A pesar de que las autoridades de Medellín y Antioquia, así como organizaciones e independientes, adelantaron campañas en contra del uso de pólvora, los medellinences le dieron la bienvenida al mes de diciembre con la tradicional alborada.
Se trata de un día reconocido por los habitantes de esa ciudad, hace más de dos décadas. Un gran número de personas en la capital antioqueña esperan, cada año, que el reloj marque las 12:00 del primero de diciembre para celebrar la llegada de la Navidad y encargarse de ser escuchados.
El pasado 29 de noviembre, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá dio a conocer el resultado de cuatro operativos en diferentes zonas de Antioquia: la incautación de 200 kilos de pólvora que iban a ser usados para la alborada y la época decembrina.
También se ha hecho una ‘huellatón’, para que las personas registren las huellas de sus mascotas en unos tarjetones físicos, en rechazo al uso de pólvora en las fiestas navideñas, por las graves lesiones que puede generar no solo en humanos, sino en la flora y la fauna.
Sin embargo, tan solo unos segundos después de las 12:00 de esta noche, usuarios en Twitter ya mostraban y publicaban cómo se veía y se escuchaba Medellín y el área metropolitana desde las alturas.
Algunas personas critican esta práctica que, arguyen, data de la época del narcotraficante Pablo Escobar, en la que sus trabajadores quemaban pólvora para ostentar y darle la bienvenida al último mes del año.
La práctica se popularizó en la primera década del 2000, según algunas versiones, porque en noviembre del 2003, con el proceso de desmovilización del Bloque Cacique Nutibara (paramilitar), dirigido por Diego Murillo Bejarano, alias ‘Don Berna’, los desmovilizados, con la gran influencia que tenían en barrios como Miraflores y Manrique, la Comuna 13, y corregimientos como Altavista, San Cristóbal y San Antonio de Prado, reunieron tacos y voladores y los detonaron para celebrar su ‘reinserción’ a la vida civil.
Y aunque muchas personas no piensan en los orígenes de esa tradición, sino que simplemente celebran en familia o con amigos la llegada de la Navidad (el 29 de noviembre la ciudad encendió los alumbrados navideños), los ciudadanos demuestran que cada vez hay más consciencia en el tema
Por ejemplo, el año pasado el mismo día, que es uno en los que más quemados se presentan en las salas de urgencias, sorprendió con muy pocos casos, con una reducción de 80 %, según informó el periódico El Colombiano.
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