Tres personas muertas, siete heridas y otras seis desaparecidas dejaba hasta este miércoles en la noche una creciente de lodo y piedras que bajó por el cauce del río Manco y la quebrada La Grande en zona rural de Piedecuesta (Santander).
La emergencia, originada por las fuertes lluvias, provocó el cierre indefinido de la principal vía de comunicación de Bucaramanga con la capital del país.
Édgar de Jesús Rojas Ramírez, director regional del Instituto Nacional de Vías (Invías), aseguró que se encuentran analizando las afectaciones sobre la calzada y por el momento no hay un tiempo estimado de apertura de la vía.
El tramo más afectado es entre Piedecuesta y San Gil, en donde las aguas se llevaron parte de la banca e, incluso, un puente, a la altura del sector de Pescadero.
El coronel Óscar Javier Herrera, comandante del Batallón Caldas, el cual coordina las labores en el sector, indicó que entre 48 y 72 horas se tardarían los operarios en despejar el lodo, piedras y árboles que hay sobre la carretera.
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Herrera indicó que los derrumbes se registraron entre los kilómetros 72 y 77 donde un tramo de 50 metros de calzada desapareció por el desbordamiento del río.
Las autoridades recomendaron a los conductores viajar por la Ruta del Sol (vía a Barrancabermeja) para desviarse en el sector de La Lizama para llegar a Bogotá.
“La problemática es poder ir hasta San Gil y Socorro mientras abren la carretera, pues no hay vías alternas para llegar hasta esos municipios santandereanos”, dijo Ariel García, presidente de la Junta de Vigilancia de Copetrán.
El rescate de Dilan
Dilan Jaimes, un bebé de 9 meses, se convirtió en el símbolo de esperanza de la tragedia, tras ser rescatado luego de ser arrastrado por las aguas y permanecer seis horas entre las ramas de un árbol.
Animales también han sido afectados por la avalancha. Organismos de socorro los atienden en la zona.
Cortesía
Dilan se encontraba con su madre Ingrid Hernández y dos hermanos, de 5 y 9 años, en la vivienda de una granja avícola, que fue arrasada por las aguas.
El niño, fue hallado por José Daniel Jaimes, un labriego de la zona, quien actuó como improvisado socorrista.
“Removimos con cuidado los escombros y encontré al niño que estaba totalmente cubierto de lodo. Le lavamos los ojos y lo cargué para entregárselo al papá que había sido arrastrado y había montado al niño a un chifonier. En la madrugada ya habíamos rescatado a una señora que la avalancha la arrastró más de 400 metros”, agregó Jaimes.
El menor fue llevado con su padrea una clínica de Piedecuesta. Su madre y sus hermanos no habían sido hallados anoche, pese a que las labores de búsqueda continuaban por tierra y con drones.
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La avalancha además ocasionó la muerte de cientos de aves de galpones ubicados en Piedecuesta, que fueron arrasados por la corriente.
De acuerdo con información de la Unidad de Gestión del Riesgo, en lo que va del 2020 se han registrado 11 muertes como consecuencia de las lluvias.
En la noche del martes también ocurrió otra tragedia en Chinchiná, Caldas, donde cinco personas murieron sepultadas por un deslizamiento de tierra, en el barrio los Mangos, debido a las fuertes lluvias, que afectó a cuatro viviendas. Otros hechos se han registrado en Cundinamarca y Chocó.
FÉLIX QUINTERO
Editor de ADN
BUCARAMANGA
En Twitter: @Felix_Quintero
