El proceso de vacunación en dos de los municipios menos habitados del país ya comenzó. Sin embargo, y pese a que cualquiera podría pensar que vacunar a poblaciones que apenas superan los mil habitantes sería un proceso que podría durar un par de semanas, lo cierto es que este trabajo avanza en un promedio similar, e incluso por debajo al de las ciudades más pobladas del país.
Puntualmente estamos hablando de los casos de Jordán, en Santander, y Busbanzá, en Boyacá.
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Estos están entre los cinco municipios menos poblados del país y Busbanzá, según el último censo, es el menos poblado. Estas localidades tienen 1.163 y 903 habitantes, respectivamente.
Según expertos, lo más recomendable a la hora de comenzar el proceso es saltarse las fases y comenzar a vacunar a toda la población priorizada para que así, cuando se presenten focos de contagio, la letalidad será mínima, pues la población más expuesta ya estará inmunizada.
Esto son mayores de 60 años y toda la población con comorbilidades.
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“En todas partes debemos mantener el cometido de vacunar a aquellos con más alto riesgo de enfermar gravemente y fallecer por covid-19. Esto está en relación con la edad, las profesiones de mayor exposición o riesgo y las comorbilidades. Así que hay que cumplir con los planes”, aseguró Yessica Giraldo, epidemióloga y docente de la Universidad CES.
En ese sentido opinó Laura Rodríguez, epidemióloga e investigadora de la Universidad Industrial de Santander (UIS).
“En municipios pequeños que tienen un predominio de ruralidad, el proceso de vacunación, para ser más eficiente, podría abordar todas las fases de los grupos de riesgo al mismo tiempo (…). Vacunar de una a las poblaciones de riesgo priorizadas en primeras etapas hasta comorbilidades, pues la letalidad en los municipios pequeños es muy alta”, explicó Rodríguez.
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Esto, además, permitirá ahorrar tiempos y costos.
Y sobre quienes consideran que se debería aprovechar que estos municipios son pequeños y sería viable vacunar a toda su población, Giraldo comentó que después de vacunar a la población priorizada, se deben priorizar las regiones y los municipios con mayor afectación. No obstante, aclaró, no se puede cambiar el enfoque de inmunizar primero a quienes están más expuestos.
En todas partes debemos mantener el cometido de vacunar a aquellos con más alto riesgo de enfermar gravemente y fallecer por covid-19
En el caso de Jordán, en el último reporte habían aplicado 40 de las 59 vacunas que han recibido por parte de la Gobernación de Santander.
Estas, todas primeras dosis, han estado destinadas a población mayor de 70 años. Allí han recibido fármacos de Sinovac, Pfizer y AstraZeneca.
Teniendo en cuenta que de las dosis recibidas habían aplicado 40, la vacunación en este municipio avanza en 3,43 por ciento. Y ninguna persona está inmunizada completamente. Allí están a la espera de la llegada de nuevas vacunas.
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Sin embargo, este es un municipio de baja afectación covid y hasta diciembre no habían presentado ningún solo caso. De hecho, llevan varios meses sin presentar un solo positivo.
En cuanto a Busbanzá, informaron desde la administración municipal, han llegado 86 vacunas, de las cuales, en su último reporte, 29 no habían sido suministradas finalizando la semana pasada, pues se estaba esperando a que se cumpliera la fecha para aplicar segundas dosis.
Estas vacunas fueron destinadas para el personal de la salud, quienes están vacunando, y adultos mayores de 80 años.
En este municipio boyacense la vacunación avanza al 9,54 por ciento.
El área urbana de Busbanzá es de apenas cinco kilómetros.
Cesar Melgarejo/EL TIEMPO
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Busbanzá, además, lleva varios meses sin registrar casos nuevos del virus, lo que da tranquilidad a las autoridades, pero también las tiene con las alarmas prendidas, ya que quieren evitar que el virus regrese a sus calles.
Por ahora, ambos municipios están a la espera de nuevas dosis por parte de las respectivas Gobernaciones, teniendo en cuenta que en los últimos días han llegado más fármacos al país.
Caso Providencia
Contrario a lo que pasa en estos dos municipios, en Providencia ya alcanzaron la inmunidad de rebaño.
Así lo informó esta semana en ministro de Salud, Fernando Ruiz. Esta isla, así como Santa Catalina, se convierten en la primera localidad del país con esta característica, que es clave para contener la propagación del virus.
Ya fueron vacunadas más de 2.900 personas, lo que representa una cobertura del 80 por ciento. Allí viven alrededor de 5.000 personas.
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«Esto nos da una cobertura importante, pues ya prácticamente tenemos la inmunidad de rebaño en la isla de Providencia. Así se logra proteger a la población frente a los eventuales riesgos que puedan tener ante la llegada de personas desde el continente», aseguró Ruiz.
Este proceso, en parte, se realizó en medio de la reconstrucción de la isla tras el paso del huracán Iota, que devastó la isla a mediados de noviembre del 2020.
Las personas se vieron obligadas a dormir en albergues y carpas, lo que impedía un adecuado distanciamiento y el apropiado uso de los protocolos de bioseguridad.
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