Campesinos y líderes ambientalistas de las provincias de Occidente, Ricaurte y Centro, en Boyacá, se reunieron este miércoles de nuevo en la ciudad de Chiquinquirá con el propósito de rechazar la intervención de la empresa Geofizyka Torún, la cual pretende analizar el subsuelo de 13 municipios del departamento y uno más de Cundinamarca.
De acuerdo con los habitantes de la región, permitir que la empresa canadiense realice los estudios que solicita la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) es permitir que se le abra la puerta a una exploración con fines mineros mucho más avanzada en la zona, y que posteriormente a la explotación de hidrocarburos sea inevitable.
Tras la reunión, las comunidades de la zona de influencia del proyecto sísmico se desplazaron hasta el sector Boca de Monte, en límites entre los municipios de Caldas y Pauna, para adelantar un plantón con el que manifestaron ante las autoridades nacionales su rechazo al estudio.
Esto no tiene que ver con un ataque al recurso hídrico, solo es para conocer si Boyacá tiene o no potencial hidrocarburífero
Entre tanto, y luego de la solicitud elevada por el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, ante la ANH con el objetivo de que sean suspendidos los estudios de sísmica, el presidente de ese organismo aseguró en entrevista con la W Radio que le parece conveniente la petición del mandatario regional, ya que ayuda a esclarecer los alcances del proyecto y a eliminar los temores del posible fracking entre los moradores de la zona.
“Esto no tiene que ver con un ataque al recurso hídrico, solo es para conocer si Boyacá tiene o no potencial hidrocarburífero”, aseguró Velandia.
Por su parte, el director de Medio Ambiente de Boyacá, Fabio Medrano, pidió nuevamente a la ANH abrir, cuanto antes, un espacio de conversación con el gobierno departamental y con la comunidad, para que atiendan sugerencias e inquietudes.
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