Una dura crisis vial afecta al sur del país luego del desprendimiento de un amplio tramo de la carretera central que une a Huila con Caquetá y Putumayo.
El gobernador del Huila, Carlos Julio González Villa, afirmó que la emergencia se presenta entre los municipios de Garzón y Gigante, lo que impide el paso de todo tipo de vehículos en los dos sentidos.
«El cierre de la vía fue recomendado por Invías para preservar las vidas humanas», aseguró el gobernador, quien visitó esa zona para buscar salidas toda vez que la carretera une a Neiva con Pitalito y San Agustín, así como con las ciudades de Florencia y Mocoa. Miles de vehículos la utilizan a diario.
En cuanto a vías alternas, se verifica el estado del tramo Gigante-Zuluaga-Garzón para revisar su condición actual y definir el tipo de transporte que se podría movilizar por esa zona.
En el tiempo que dure la emergencia, el transporte pesado debe circular por la vía La Plata-El Pital pero el recorrido es más largo.
El tramo afectado es una vía nueva construida por Emgesa para dar paso al proyecto energético de la represa El Quimbo por lo que en el sitio también hacen presencia altos directivos de esa empresa.
«Enel-Emgesa hace evaluación de los puntos críticos y se compromete a ejecutar las soluciones por lo que la ANI debe permitir esa intervención, que se hará de acuerdo con las recomendaciones técnicas que haga la empresa Ingetec», dijo el gobernador del Huila y agregó que, en un plazo máximo de 3 días, se tendrán los planes de acción para hacerle frente a esta emergencia.
También se realizará una articulación con las empresas Surgas y Alcanos para dar solución al suministro de gas natural al centro y sur del departamento.
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