Inicio Colombia Denuncian que abandono reina en varios kilómetros de Ruta del Sol II

Denuncian que abandono reina en varios kilómetros de Ruta del Sol II

Pese a los adelantos que el Instituto Nacional de Vías (Invías) realiza desde el 2017 en la Ruta del Sol II, luego del escándalo que sacudió a la empresa brasileña Odebrecht, mandatarios de los tramos que comprenden esta importante obra manifiestan que el estado de la vía es de completo abandono.

Los alcaldes cuya jurisdicción comprende el corredor vial entre Puerto Salgar (Cundinamarca) y San Roque (Cesar), y la Transversal Río de Oro – Aguaclara – Gamarra que inicia en Río de Oro (Cesar) y termina en Puerto Capulco y la vía proyectada hacia los puertos al norte de Gamarra, denuncian que las obras se encuentran detenidas y no se nota ningún avance.

Victoria Eugenia Ortegón, alcaldesa de Puerto Salgar (tramo 1 hasta Puerto Araujo en Cimitarra, Santander), señala que el tramo que pertenece a su jurisdicción se ha deteriorado hasta el punto de generar incrementos en la accidentalidad.

“Hay un corregimiento que se llama Puerto Libre –indica la alcaldesa–; había muchos negocios en esa vía y la gente se tuvo que mover. Ellos construyeron unas casetas donde, supuestamente, iban a quedar los negocios, pero no las han entregado. No han pagado recibos de energía, nada”.

Ortegón asegura que de acuerdo con lo estipulado, se debían entregar 10 kilómetros de la vía pavimentados, además de añadir unos paraderos, pero hasta la fecha no hay ni señalización.

“Tengo actas donde se comprometen (Invías) a cumplir con su parte –insiste la mandataria–; pero esta es la fecha en la que ninguna de las vías veredales ha tenido un doliente. Se me dificulta hacerme cargo de esto porque no tengo la maquinaria suficiente. Somos entidades que tenemos que ir a las manos. No es justo que nosotros les arreglemos las cosas a ellos”.

1. Ruta del Sol sector 1:Luego de la entrega de la autopista entre Guaduas y Puerto Salgar, de 61 kilómetros en doble calzada, ahora se avanza en el intercambiador de San Miguel.

Foto:

Página web Ruta del Sol

Respecto al retraso, se indica que el 14 de septiembre de 2017, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca emitió medidas cautelares complementarias entre las cuales ordenó a la Concesionaria Ruta del Sol S.A.S. la entrega de la infraestructura. El 20 de octubre de 2017 se llevó a cabo la reversión de la infraestructura a la ANI y su entrega inmediata al Invías.

Juan Esteban Gil, director general del Invías, señaló que la obra fue recibida con un deterioro del 80 por ciento.

“Recibimos huecos a lo largo del corredor y pérdidas de días –asevera Gil–; recibimos mucha de la obra que era obligación construir de manera visceral y no estaba lista”.

El contrato inicial de la obra fue declarado nulo el pasado 7 de agosto por el tribunal de arbitramento conformado a instancias de la Cámara de Comercio de Bogotá. En la actualidad, el Invías está a cargo de las obras de mantenimiento rutinario y de la continuación de la construcción de los 600 kilómetros del proyecto sobre la Troncal del Magdalena medio y 71 km sobre la Transversal 70, que no fueron ejecutadas por el concesionario saliente.

Versiones encontradas

Invías sostiene que, luego de que se retirara a la multinacional de la obra, los trabajos cumplen, hasta el momento, avances de 264 kilómetros recuperados, 6 kilómetros construidos y un mejoramiento de 26 kilómetros de vía.

No obstante, el alcalde de San Alberto, Cesar, Pedro Guevara (tramo 3 de la obra hasta San Roque), asegura que el tramo de la vía que cruza por San Alberto se encuentra en total abandono.

“El material que sacan lo amontonaron a un lado de la vía –señala Guevara–. Hemos enviado seis cartas para que saquen las máquinas, tanto en el sector dos como en el uno. Tenemos los dos sectores y no nos han entregado el fresado. Aquí no han empezado arreglos, tenemos deterioro y vías con huecos. La vía Bucaramanga – Valledupar se encuentra en mal estado”.

Aspecto de la Ruta del Sol II cuando se adelantaban las obras.

Foto:

Jaime Moreno/Archivo EL TIEMPO

Según el mandatario, los peajes funcionan sin ningún inconveniente en las vías San Alberto – Aguachica y San Alberto – Lizama (esta última solo opera a un carril en algunos tramos).

Mientras tanto, el director aclaró que la inversión de los contratos adjudicados en septiembre del 2018 se encuentra por el orden de los 368.000 millones de pesos. En noviembre de ese año se realizó una jornada de ‘tapa huecos’.

Hasta el momento, los avances representan un 17 por ciento de la obra y se han ejecutado 54.631 millones de pesos.

“Estos contratos se empezaron a ejecutar en noviembre y terminan en febrero del 2020 –sostiene Gil–. Llevamos un 17 por ciento efectuado”.

En la obra trabajan más de 1.280 personas en 217 máquinas que operan por el corredor vial que, por ahora, no tiene cierres y se puede transitar de manera regular.

“También se construirán 50 kilómetros de doble calzada nueva –explica el director–. Nosotros estamos trabajando en tramos parciales mientras tanto, la ANI está estructurando un nuevo contrato de construcción para que lo ejecute el año entrante y se adjudicaría para comenzar las labores”.

En el caso de Ocaña (tramos 4 y 5 entre Gamarra – Aguaclara – Ocaña), Wilmar Bayona, alcalde (e) asegura que desde el momento en que Invías tomó el control de la obra, estas han quedado inconclusas.

“Era un proyecto muy bueno para la región –dice Bayona–; pero después que lo tomó Invías, las obras quedaron inconclusas, ha seguido así. No vemos cuándo puedan tener fin porque están paralizadas, Invías no está trabajando en la parte que le corresponde (Ocaña – río Oro – Sandilla – Aguaclara). La cancelación del contrato y que Invías lo haya tomado ha retrasado los trabajos”.

Era un proyecto muy bueno para la región, pero después que lo tomó Invías, las obras quedaron inconclusas, ha seguido así

El mandatario asegura que debido al abandono de las obras entre Ocaña y Cúcuta, las tractomulas transitan por el casco urbano, lo cual ha deteriorado las calles de esta ciudad de Norte de Santander.

Sobre el proyecto de concesión que permita terminar las obras, la ANI señala que se encuentra estructurando dicho contrato para tener el nuevo encargado en el 2020.

El costo inicial de la obra quedó estipulado en 3.1 billones de pesos y debía ser entregada en 2016. No obstante, advierten desde el Invías que su entrega final se podría dar en el 2023 y su costo podría elevarse producto de dicho escándalo.

Los departamentos en los que en la actualidad se centran los cinco tramos de intervención de la obra son Cundinamarca, Boyacá, Santander, Norte de Santander y Cesar.

Por otro lado, habitantes de San Roque, zona rural de Curumaní, Cesar (tramo 3) aseguran que aún no han empezado las obras pese a que desde hace dos años se dijo que para el 2019 se iniciaban los trabajos en el cruce hacia San Roque. Ahora se les informó que se iniciarán en el 2020.

Eledis Tamayo, veedora de las obras, asegura que se instaló una caseta en la que dijeron que empezarían a ubicar la maquinaria, pero a dicho punto no ha llegado ninguna persona que trabaje en la obra.

“Aquí todo está igual, nadie lo ha tocado –resalta Eledis–. Hace unos meses hicieron unas cabeceras de unos puentes pero no ha pasado nada más. No nos han dicho ni por dónde va a pasar y nosotros necesitamos que nos ayuden porque la elaboración de esta vía puede afectar el comercio en este punto”.

De acuerdo con la veedora, en este tramo de la vía muchos de sus habitantes cruzan constantemente entre fincas para comercializar sus productos, por lo que la elaboración de la vía les impediría cruzar libremente. Solicitan un puente o un túnel para poder continuar con sus costumbres.

“A San Roque no lo han tocado –insiste Eledis–. Nuestra comunidad no es apoyada. Esta obra es grande, pero que a nuestro pueblo no le va a dejar beneficio, porque tenemos 60 familias que viven de la vía. Ellos venden y sobreviven acá. Y si ellos hacen la vía, esas familias quedan sin nada que hacer”.

MIGUEL ÁNGEL ESPINOSA BORRERO
Redactor de EL TIEMPO
En Twitter: @Leugim40