En el cerro más alto de El Dorado, Meta, se ondea la segunda bandera de Colombia más grande del país, como vigilando la docena de municipios del departamento que desde allí se divisan a lo largo y ancho de la sabana.
En la época de la zona de distensión, desde este pico estratégico, ubicado 1.300 metros sobre el nivel del mar, guerrilleros de las Farc hostigaban el área urbana de El Dorado y la base del Ejército, ubicadas 750 metros más abajo en el piedemonte que separa la cordillera Oriental de los Llanos Orientales.
El alcalde de El Dorado, Óscar Olaya, recuerda que en una ocasión la Fuerza Pública tardó cerca de una semana en lograr la retirada de los guerrilleros tras los insistentes ataques con cilindros bomba y granadas de largo alcance que hacían desde ese cerro, ubicado en la vereda Palo Marcado.
A este lugar solo se llegaba caminando, o a lomo de mula, hasta hace apenas pocas semanas. Gracias al trabajo adelantado con maquinaria amarilla de la Gobernación del Meta convirtieron el empinado camino en una vía destapada a donde hoy pueden llegar camionetas de gran potencia.
El pasado 9 de abril, con ocasión de la conmemoración del Día Internacional de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas, el mandatario local, funcionarios de la Unidad para las Víctimas, de la Gobernación del Meta y dirigentes regionales, llegaron hasta lo más alto de la vereda Palo Marcado.
La bandera
Ante los habitantes de la vereda se izó el tricolor colombiano en un mástil de 25 metros de altura que sostiene la bandera de 10,30 metros de largo por 6,00 de ancho; mientras volaban cuatro parapentistas con sus coloridos paracaídas adornaron el imponente paisaje matizado por los distintas tonalidades del verde de la montaña con el de la llanura, cruzada por las aguas del río Ariari.
El Alcalde sostiene que la siguiente tarea es hacerle una placa huella a los siete kilómetros de la vía que unen al área urbana de la población con el alto en la vereda Palo Marcado y mejorar la vía de la vereda La Cumbre para que queden conectadas y se convierta en un anillo vial y ruta turística en la que se puedan hacer eventos deportivos como ciclo montañismo, moto cros y parapente, teniendo en cuenta que El Dorado está a apenas 75 kilómetros de Villavicencio.
En algún momento, El Castillo era identificado con alta influencia de la guerrilla, mientras que en El Dorado predominaban los paramilitares
El mismo día que se izó la bandera de Colombia en el pico más alto de El Dorado, la gobernadora Marcela Amaya entregó una vía pavimentada de ingreso a la población, que entre los años 1998 a 2002 permanecía cerrada desde las 6:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana con una cadena muy gruesa y candados.
“La vía se sellaba por un posible atentado de un carro bomba -de las Farc- y la gente no podía salir ni entrar en la noche, entonces decíamos que teníamos pueblo por cárcel después de las 6:00 de la tarde”, recuerda el alcalde Olaya.
La presencia de los grupos armados ilegales en esta zona del Alto Ariari fue bastante visible, en algún momento el municipio vecino de El Castillo era identificado con alta influencia de la guerrilla, mientras que El Dorado la predominante era de paramilitares.
Reparación colectiva
Allí se presentaron muchos hechos victimizantes que desbordaron todas las acciones delictivas, asegura el director territorial de la Unidad para las Víctimas, Carlos Arturo Pardo, que ocasionaron en el territorio desapariciones forzadas, reclutamiento de menores, desplazamientos y violencia sexual, entre otros.
A raíz de esa escalada de violencia la comunidad declaró que fueron afectados por el conflicto armado y después del análisis que hizo la Unidad para las Víctimas el 25 de noviembre de 2103 se incluyó el municipio como sujeto de reparación colectiva, que significa reparar la afectación del daño en todo El Dorado.
En esa tarea “venimos trabajando hace cuatro años” y para ello se estableció un plan de reparación integral a las víctimas que incluye 38 acciones de las cuales se han cumplido 20 y el resto se deben terminar de cumplir este año y así El Dorado se constituiría en uno de las primeras reparaciones colectivas en todo el país, sostiene Pardo.
El alcalde Olaya dice que El Dorado es el primer municipio del Meta y el segundo del país libre de sospecha de minas antipersona certificados por la Organización de los Estados Americanos y está en proceso de concertación del plan de retorno de los desplazados.
A esto se suma que la Gobernación abrió la licitación para remplazar el viejo puente de La Amistad sobre el río Ariari, que mejorará la comunicación de este municipio y los de El Castillo y Lejanías, se hacen mercados campesinos cada mes para comercializar los productos que producen como café, cacao, piña, plátano, naranja, mandarina y aguacate.
Además, se han apoyado proyectos productivos para los campesinos y para empoderar las juntas de acción comunal con dotación de computadores, archivadores y capacitación, así como el mejoramiento de las casetas comunales de las inspecciones de San Isidro, Pueblo Sánchez y la cabecera municipal, agrega el alcalde.
El Dorado, llamado así porque en una de época de uno de los siete ríos que lo atraviesan sacaban oro, le apuesta a una gran experiencia de territorio hacia la construcción de paz y reconciliación con la producción y comercialización de sus productos agrícolas y con la apuesta a una oferta turística desde el cerro Palo Marcado donde se ondea la segunda bandera más grande de Colombia.
NELSON ARDILA ARIAS
Corresponsal de EL TIEMPO
VILLAVICENCIO
