Orlando Lasso, único sobreviviente de la tragedia que se presentó en la vereda Travesías del municipio de Calarcá, en Quindío, relató este lunes que la montaña que se vino abajo y sepultó a su familia, tenía una filtración y que incluso la vía de acceso al sector permanecía con agua “la gente preguntaba que si un tubo se había roto en la escuela pero nada, yo les decía que esa agua venía de arriba, de la montaña».
«Les mandamos carta al Estado con las profesoras que estuvieron antes, pero nunca nadie nos cumplió, venían y tomaban fotos y registros pero nunca nos dijeron que estábamos en zona de riesgo o que teníamos que evacuar”, denuncia Lasso.
Nunca nos dijeron que estábamos en zona de riesgo o que teníamos que evacuar
El hombre perdió a su esposa Deisy Buriticá de 41 años y sus tres hijos; Andrés Felipe Lasso Buriticá de 16 años, Jhon Fredy Lasso Buriticá de 14 años y Leison Stiven Lasso Buriticá de 12 años, quienes habitaban en la escuela Teresa García, que quedó bajo un deslizamiento de tierra que se presentó el sábado.
Luis Alfonso Ramírez, habitante del sector, contó que esta era una tragedia anunciada. “Esa situación se debe a una fuente de agua que había por encima de la escuela, se produjo la ruptura del tubo madre y eso hizo que se fuera ablandando el terreno y produjo el derrumbe, desgraciadamente se habían lanzado las alertas desde hace varios años y se le dijo a la señora que no entrara pero esto era ya muerte anunciada prácticamente”.
Desde hace ocho años Buriticá y su familia eran los caseros de esta escuela rural, además la mujer preparaba los alimentos del restaurante escolar. Ella, sus tres hijos y dos menores más; Jean Pierre Isaza de 11 años y William Camilo Ospina Pineros también de 11 años, fueron las víctimas fatales de este deslizamiento.
La familia Lasso Buriticá había logrado evacuar la sede educativa en la madrugada del sábado y fueron acogidos en una vivienda vecina, pero horas después decidieron regresar a la escuela para revisar los daños y buscar algunas pertenencias, cuando un nuevo derrumbe cayó sobre el lugar. El padre de los menores se salvó pues había salido unos minutos antes.
Según la alcaldesa de Calarcá, Yenni Trujillo, a la familia se le había informado que tenía que evacuar. “Esta emergencia se pudo prevenir, se le dijo a esta familia que evacuara y que no estuvieran en el sector, la noche anterior al siniestro ellos durmieron donde una vecina pero a veces por sacar cosas materiales se pierde la vida”.
Jorge Elí López, rector de la institución educativa San Rafael, a la que pertenecía la sede Teresa García, afirmó en un medio local que no sabía nada de filtraciones de agua, “ahí se estaba trabajando era sobre unos pozo séptico que había colapsado, incluso el día de la tragedia los obreros estaban hospedándose en la sede educativa”.
La escuela que funcionaba hace unos 15 años, contaba con nueve estudiantes, uno de ellos murió en la tragedia. Los otros cuatro menores que quedaron bajo el derrumbe estudiaban en otra escuela rural.
Durante este lunes, un grupo de geólogos evaluó el terreno en la vereda Travesías y además el de las cárcavas del municipio de Pijao, que permanecen bajo la lupa por la emergencia que podrían ocasionar tras el aumento de las lluvias.
Los expertos advirtieron que encontraron movimientos de remoción en masa en el municipio de Córdoba, en zona limítrofe con Calarcá, lo que hacen necesaria una evaluación más profunda del sector.
De otro lado, la inestabilidad del terreno ha provocado que por momentos se suspenda la búsqueda de las víctimas. Hasta el momento los organismos de socorro han hallado los cuerpos de la mujer y dos de sus hijos, además del menor William Pineros. Aún continúan desaparecidos Andrés Felipe Lasso y Jean Pierre Isaza.
Se generó una alerta obviamente sobre la estabilidad del terreno y se sacaron nuevamente los cuerpos de socorro
Además, 18 personas que vivían en el sector, fueron evacuadas de sus viviendas debido al riesgo que presenta el terreno. La Alcaldía de Calarcá adecúa un sitio cerca al estadio Guillermo Jaramillo Palacio para albergarlas y brindarles atención primaria, entrega de ayudas humanitarias y acompañamiento psicosocial.
El director Unidad Departamental de Gestión del Riesgo del Quindío, Faber Mosquera, señaló que “se generó una alerta obviamente sobre la estabilidad del terreno y se sacaron nuevamente los cuerpos de socorro (de la zona del desastre) y se está haciendo una nueva evaluación para determinar el nivel de seguridad y poder desarrollar las actividades. Estamos trabajando en controlar alrededor de 100 deslizamientos que se han presentado en todo el departamento”.
Laura Sepúlveda
Para EL TIEMPO
ARMENIA
