El piano Bechstein, interpretado por Andrés Santander y José Manuel Zapata, alegrará la noche con la novena sinfonía de Beethoven. El instrumento musical, que se paseará por la sala de Fundaciones, es una pieza artística que combina la escultura con el performance. Los asistentes podrán regocijarse con esta presentación y serán testigos porque, desde hoy, el Museo de Arte Moderno de Medellín (Mamm) comienza a festejar los 40 años de su inauguración.
El Mamm, según cuenta su directora, María Mercedes González, surgió de la efervescencia artística que vivió la ciudad en los años 70. Ese interés por el arte puede entenderse luego de las tres bienales de arte que desarrolló Coltejer en 1968, 1970 y 1972.
Las generaciones que vivieron ese florecer artístico quisieron buscar un lugar en el que el arte moderno y contemporáneo pudiera ser apreciado. “Había mucho furor por el arte del momento. Entonces, un grupo de artistas quiso fundar un museo de arte moderno para acoger las prácticas artísticas más importantes de Antioquia”, explica González.
Había mucho furor por el arte del momento. Entonces, un grupo de artistas quiso fundar un museo de arte moderno para acoger las prácticas artísticas más importantes de Antioquia
Los artistas, con esa idea en mente, fundaron el museo en el barrio Carlos E. Restrepo. Y, si bien se estableció en 1978, solo fue hasta 1980 que se hizo la primera exposición. El museo acogió a los visitantes durante tres décadas en ese barrio que, por su presencia, adquirió un aire bohemio y cultural. En la década del 80 llegó una donación que se convirtió en la insignia del museo: un grupo de obras de la artista envigadeña Débora Arango.
María Mercedes González, directora del museo, considera que este es un espacio vital para la ciudad.
Jaiver Nieto / EL TIEMPO
El arte moderno, según explica Diego Arango, profesor de historia del arte en la U de A, surgió a finales del siglo XIX y comienzos del XX. Para Arango, el arte tuvo una crisis institucional y, por ello, entre otras razones, surgió lo que conocemos como el arte moderno. “Con las manifestaciones del arte moderno, que estaba alejado de la institucionalidad, se busca darle acogida a esas nuevas formas de arte. Así es como en Estados Unidos se funda el primer museo de arte moderno, luego se replica la idea en otros países y así aparece un museo de arte moderno en Medellín”, cuenta Arango.
González agrega que durante todos estos años, el museo ha tratado de darles visibilidad a los artistas colombianos. La colección del museo la integran más de 2.000 obras, principalmente de arte colombiano del siglo XX.
En 2006 el museo recibió en comodato el edificio Talleres Robledo, en Ciudad del Río. Después de trabajos de reparación y adecuación del lugar, el museo logró trasladarse allí a finales de 2009. Ese cambio de ubicación, dice González, repercutió de manera muy positiva en el número de asistentes: mientras en Carlos E. recibían un aproximado de 7.500 espectadores al año, en la nueva sede se acercaron unos 40.000. El crecimiento siguió siendo exponencial pues el año pasado 110.000 personas lo visitaron.
El aumento de público no solo se entiende por el cambio de sector: “También hubo un cambio en la programación, hay una renovación, se hacen más exposiciones, se incluyen nuevas expresiones como la música”, explica González.
Ubicados en Ciudad del Río, se abrió un concurso internacional dirigido a arquitectos para la remodelación física del museo. Finalmente, la responsabilidad se le dio a una firma de arquitectos peruanos que hizo una alianza con dos arquitectas de la ciudad. El proyecto, cuenta González, costó 24.000 millones de pesos, la mitad financiada por la alcaldía de Medellín y la otra mitad por aportes del sector privado.
En 2015 se concluyó la remodelación. “No se trató solo de un edificio, sino de la renovación del proyecto cultural del museo en su conjunto: más exposiciones, más espacios para la música y el cine”, explica González.
Con nuevas exposiciones podrá disfrutar el público común de los 40 años del Mamm
Jaiver Nieto / EL TIEMPO
Para Álvaro Morales, director de la Casa Museo Pedro Nel Gómez, el Mamm ha sido fundamental en el desarrollo cultural de la ciudad. “No solo ha sido un excelente escenario para las expresiones del arte moderno y contemporáneo, sino que ha dado cabida a una generación de críticos, artistas y curadores que se han formado alrededor de sus proyecciones y sus proyectos. Hoy, el Maam es un referente cultural de la ciudad y del departamento”, expresa Morales.
Maderley Ceballos, docente y coordinadora general de la Cinemateca Municipal de Medellín, cree que el Mamm es más que un referentente de arte contemporáneo: “Es un epicentro de las expresiones artísticas de la ciudad y de otras partes del mundo. Es un lugar de encuentro en el que confluyen la danza, el teatro, el cine”.
Ceballos resalta, además, que la oferta de cine ha sido muy importante, incluso desde que el museo estaba en Carlos E Restrepo. “El cine, en Carlos E, era un espacio para hacer talleres, un lugar para uno encontrarse con amigos. Era, en general, un sitio para ver un cine diferente. Ahora, en la nueva sede, nos da una programación muy variada otra vez después de la apertura de la nueva sala”, expresa Ceballos.
Es un epicentro de las expresiones artísticas de la ciudad y de otras partes del mundo. Es un lugar de encuentro en el que confluyen la danza, el teatro, el cine
El museo celebrará su cumpleaños número 40 mientras sigue su esfuerzo por mantener en alto el arte local: “Venimos en un proceso de consolidación, tenemos varias apuestas como mantener la excelencia de la programación y seguir haciendo un esfuerzo para ofrecer un panorama de la producción contemporánea; además de contribuir a la consolidación de la carrera de los artistas colombianos”, dice González.
MIGUEL OSORIO MONTOYA
PARA EL TIEMPO
MEDELLÍN
[email protected]
@MiguelOsorioMon
