Aunque en la ciudad hay una reducción importante de muertes violentas, pues a la fecha se han presentado 15 casos menos que el año pasado, sigue preocupando lo que ocurre en cinco comunas donde las cifras no bajan.
La Candelaria (comuna 10), por donde diariamente circula un promedio de un millón 200 personas, los homicidios ya llegaron a los 40 casos, seis más que en el mismo periodo del 2021.
Uno de los últimos hechos se presentó el pasado 6 de junio cuando un hombre, identificado como Rubén Darío Ramírez Giraldo, de 60 años, fue ultimado con arma de fuego.
“La víctima se encontraba departiendo en el sector cuando fue abordado y le dispararon en repetidas ocasiones”, registró el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc) de Medellín.
Luis Guillermo Pardo, presidente de Centro Consultoría de Conflicto Urbano C3, explica que en esta zona, conformada por 17 barrios, está controlada por aproximadamente 30 estructuras ilegales conocidas como Convivir, que tienen influencia en este flagelo.
Cada una de ellas, con un poder microterritorial y conformada por entre 25 y 30 personas, entre las que se encuentran ciudadanos venezolanos, se encargan de rentas criminales como microtráfico, vacunas, extorsiones y fleteos. También controlan la prostitución y explotación sexual infantil.
“Esa estructura ya tiene incluidos a miembros venidos de Venezuela que fueron pillos allá o que la situación caótica los obligó a vincularse a estructuras armadas. Ese control microterritorial da acceso a varias rentas ilegales”, precisó Pardo.
El coronel José Abdón Galindo Sánchez, comandante operativo de la Policía Metropolitana, manifestó que el común denominador de los homicidios en La Candelaria están relacionados con intolerancia entre habitantes de calle, familias en inquilinatos y riñas en establecimientos de comercio. Estos representan el 66 % de las muertes violentas.
“Ellos, (los habitantes de calle) por una diferencia por el cambuche, por una sustancia, por un plástico que para ellos es esencial y vital, genera, en muchas ocasiones, riñas, riñas donde se generan lesiones, donde algunas son mortales y terminan en pérdida de vidas humanas”, dijo el comandante quien no desconoce que algunos son instrumentalizados por los grupos de la zona.
(Puede leer: La historia de las madres que recolectan y comen de la basura en Medellín)
Esa estructura ya tiene incluidos a miembros venidos de Venezuela que fueron pillos allá o que la situación caótica los obligó a vincularse a estructuras armadas.
Este mismo fenómeno se repite en Laureles – Estadio (comuna 11) donde, a la fecha, pero el año pasado, fueron cinco las personas asesinadas, cuatro casos menos que en estos meses del 2022. “Estas comunas son las que más se afectan por la intolerancia” recalcó el coronel.
Lo que pasa en estas zonas dista de lo que se vive en San Javier (comuna 13), Robledo (comuna 7) y Buenos Aires (comuna 9), áreas donde el aumento está relacionado al accionar criminal.
“Son ajustes internos allá en las estructuras y, sobre todo, en el tema de la renta criminal”, agregó el comandante Galindo.
En San Javier, por ejemplo, se registran seis muertes violentas más que el año pasado. Para Robledo y Buenos Aires la cifra es de dos casos más en cada una.
Julio Rengifo, analista del conflicto y defensor de Derechos Humanos en Medellín, contó que en la comuna 13, como en otras zonas de la ciudad, los homicidios son por retaliaciones entre las estructuras, fronteras invisibles y situaciones internas de las mismas bandas. También están los ataques a quienes no cumplen con el pago de las vacunas.
“Son varias estructuras que están ahí. Muchas al servicio de ‘la Oficina’, otras al servicio del ‘clan del Golfo’. Esas bandas criminales están al servicio de estructuras grandes de la ciudad”, concluyó Rengifo.
La meta de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá es que la tasa de homicidios no supere los 14 casos por cada 100 mil habitantes.
LAURA ROSA JIMÉNEZ VALENCIA
EL TIEMPO Medellín
EN TWITTER: @Laura_Rossa
Más noticias
– La inédita liberación de nueve soldados heridos en Miraflores
– El duro relato en redes sociales de joven que fue abusada por mototaxista
